El nuevo libro de Leoluca Pasqua en Paulinas Vencer la pereza. Para vivir y no sobrevivir
Hay dos tipos de pereza: una degenerativa y otra generativa, una que dispersa y fragmenta, y otra que unifica, motiva, orienta y ayuda a volver a ser dueño de uno mismo
La pereza de la que se habla en estas páginas es la de tipo degenerativo y se define su rostro para comprender cómo se manifiesta y cuáles son sus causas principales
Y también se habla de la pereza espiritual, comprendiéndola como un grave obstáculo que hay que superar para poder progresar en el camino espiritual
Un itinerario de curación para recuperar las razones de nuestra existencia, el gusto y la alegría por la vida
Y también se habla de la pereza espiritual, comprendiéndola como un grave obstáculo que hay que superar para poder progresar en el camino espiritual
Un itinerario de curación para recuperar las razones de nuestra existencia, el gusto y la alegría por la vida
(Paulinas).- Hay dos tipos de pereza: una degenerativa y otra generativa, una que dispersa y fragmenta, y otra que unifica, motiva, orienta y ayuda a volver a ser dueño de uno mismo.
La pereza de la que se habla en estas páginas es la de tipo degenerativo, que presenta aspectos más problemáticos y sutiles, que perjudica y que, con su potencial negativo, incide profundamente en la vida de una persona, hasta nublar su consciencia y afectar a todos los ámbitos de su existencia.
En estas páginas se define el rostro de la pereza, para comprender cómo se manifiesta y cuáles son sus causas principales. Ytambiénse habla de la pereza espiritual, leída principalmente a la luz de las enseñanzas bíblicas, pero también de los testimonios de los grandes maestros espirituales que, a lo largo de los siglos, han contribuido con sus escritos y sus reflexiones a definirla aún más, comprendiéndola como un grave obstáculo que hay que superar para poder progresar en el camino espiritual.
Por último, se propone un itinerario de curación en el que se indican algunos posibles remedios para superar las consecuencias que produce la pereza, para recuperar las razones de nuestra existencia, el gusto y la alegría por la vida.
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