'La voz en el silencio' de Ximo Albinyana, ediciones Fonte La inspiración del Génesis
¿El silencio?, ¿el ruido?, ¡quién puede exaltar o rechazar cualquiera de los dos si la ausencia de uno invalida al otro! Ciertamente los contrasentidos, los antagonismos, explican con relativa claridad, creer y descreer, mirar y cerrar los ojos, palabra e imagen, antigüedad y modernidad
| Raúl Carbonell Sala
Al abordar el nuevo poemario de Ximo Albinyana, me encuentro con un verso endecasílabo, que me invade: Sobre el atronador ruido del caos, y regreso a la portada del libro que curiosamente se titula La Voz en el silencio.
¿El silencio?, ¿el ruido?, ¡quién puede exaltar o rechazar cualquiera de los dos si la ausencia de uno invalida al otro! Ciertamente los contrasentidos, los antagonismos, explican con relativa claridad, creer y descreer, mirar y cerrar los ojos, palabra e imagen, antigüedad y modernidad.
A una buena parte de la sociedad europea, les parecen las Sagradas Escrituras como textos antiguos, que ya no son poesía y si lo son, son poesía para gente antigua. Esta misma sociedad con su atronador ruido del caos, es la que hace héroes de barrio a los Beatles y a los Rolling desde varias generaciones a esta parte, sin considerar que quienes dicen ser contracultura son los más ricos de Europa y los mejores sátiros de una sociedad que adora a Luzbel creyéndose libre y menos dócil que la sociedad que vio claro este insultante engaño, que siendo los componentes de estos famosos grupos musicales -unos perfectos viejecitos- es evidente que son todo lo contrario de lo que nos decían y defienden, un gran negocio, muy alejado de las humanidades y la reflexión profunda sobre la verdad de éste y de otros mundos.
Que la tierra produzca determina/ seres terrestres según sus especies. Parece que hemos sofisticado tanto el culto a la estupidez, que incluso nuestra alta formación universitaria aspira a ser cada vez más alicorta, y eso, estúpida. Y de no ser así, ¿cómo podemos tener el objetivo de formarnos para una profesión, negando a nuestra alma y a nuestro cerebro, la capacidad de ser un ente circular con todas las posibilidades de acercarse a la sabiduría. Leyendo estos versos inspirados en el Génesis, yo creo que nos retrotrae el poeta a un mundo perfectamente conectado con un pasado remoto, en un mundo, el del Siglo XXI que, sigue pensando que para ser modernos hay que hacer una gran hoguera con lo que nos ha traído hasta el lugar presente.
Actitudes como ésta nos han descubierto a grandes primates como Napoleón, Hitler o Putin, sin menoscabo de algunos más que voy a aparcar para mejor momento. Los tres han esperado situaciones de ensimismamiento de la sociedad, para odiar todo lo sagrado y convertirse en los dioses que no alcanzaron a ser ni antes ni después de sí mismos. Lo terrible es que, en su desarrollo de matar a Dios para ponerse en su lugar, murieron millones de buenas gentes que podríamos decir que estaban insonorizadas, ensimismadas en una realidad ficticia construida ex profeso por intereses particulares o económicos, y por esa misma razón les aparta de las Sagradas Escrituras y del sostenimiento de las creencias que evolucionan y respetan la vida, los sueños y las palabras que no compiten con la imagen en ningún momento, porque palabra e imagen son dos soportes para la transmisión de pureza.
Ora en silencio y hallarás la escalera/ por la que subirán tus oraciones/ y bajará la voz de Dios altísimo. Hay un amplio sector social, que toma sustancias para alcanzar la grandeza de un alma a la que degradan y destruyen sonriendo de abandono y tristeza. Ora en silencio y hallarás la escalera… Hombres y villanos buscando la grandeza, pero curiosamente introduciéndose en la fealdad del barro y el dolor del fuego, porque el gran recurso de la llamada modernidad, en un alto porcentaje y sin distinción de clase social, es la búsqueda de la destrucción para ser más originales que si buscaran la proclamación del amor. Y pocos tienen en cuenta que mientras estamos insonorizados, el mal campa por su fueros y cambia el color de la vida según mejor le venga en gana.
El poemario de Albinyana es esclarecedor. Al calor de la lumbre nacerán/ héroes y villanos que son hombres. Son varios los títulos que nos entrega este poeta nacido en Museros en 1959. Su primera publicación aparece en el año 2014 y la tituló ESCOMBROS EN LA PLAYA, restos que el mar nos devuelve para que sepamos pensar o aprendamos a hacerlo recordando. Y ya son varios los libros que de manera evidente se inspiran en las Sagradas Escrituras recordándonos aquello que se quiere obviar u olvidar. Como dijo Gabriel Celaya en un valioso poema y osando a ampliar su concepto, muy probablemente la poesía sea un ente, que cargado en el pasado se lanza al futuro. Esto es lo que pretende la poesía de Ximo Albinyana, recordar el pasado para no perder el futuro. La poesía es todo y la nada absoluta cuando no tiene ojos que se deslicen sobre lo imperceptible que la mantiene viva. Es como dijo Bécquer, la mano que toca las cuerdas del arpa, es el hecho de ir de nube en nube cuando suenan las campanas de Moguer, según Juan Ramón, y es una cita bíblica que nos acerca a la verdad tan natural como saludable.
