Combatir los abusos sexuales se ha convertido en una prioridad de la Iglesia en los últimos años, algo en lo que el Papa Francisco se ha empeñado especialmente. Buscando construir espacios de confianza para prevenir e identificar posibles situaciones de abuso, el Arzobispado de Santiago de Chile ha organizado un Diplomado en Prevención de Abusos y Promoción de Ambientes Sanos en contextos eclesiales.

La propuesta viene de la Delegación para la Verdad y la Paz del Arzobispado de Santiago, que junto con Facultad de Teología de la Universidad Católica están desarrollando un programa que comenzó el pasado 4 de agosto, formando parte de la oferta de cursos del área de Educación Continua de Teología Universidad Católica de Chile.

Desde un enfoque interdisciplinar, se trata de un programa pionero, que pretende responder a la actual crisis por la que pasa la Iglesia chilena como consecuencia de los escándalos sexuales en los que algunos de sus miembros se vieron involucrados. El objetivo es contribuir a la prevención de abusos y promoción de ambientes sanos, ofreciendo herramientas al servicio de la comprensión de las raíces de esta crisis, la prevención de éstos y la protección de los niños, niñas, adolescentes y personas más vulnerables. Todo ello, con el fin de capacitar, en caso de ser necesario, para intervenir a tiempo la realidad en vistas a la construcción de una cultura del cuidado.

El curso, que tiene una duración de 8 meses, cuenta con la participación de 65 alumnos de todas las regiones de Chile, principalmente agentes pastorales y formadores. En el programa aparecen cuestiones relativas a: (1) Fundamentos: soportes para una cultura del respeto y el cuidado de las personas; (2) Comprensión: claves provenientes de la psicología, la sociología y la teología en orden a la comprensión del abuso; 3) Prevención: aportes psico-socio-teológicos para prevenir el abuso y promover ambientes sanos y sanadores; (4) Intervención: asumiendo la responsabilidad social ante el abuso sexual: para romper el círculo de abuso, ofrecer reparación a las víctimas y sancionar a los responsables.

Desde la Universidad Católica de Chile, su rector, Ignacio Sánchez, insistía en la jornada inaugural en que “El Papa nos llamó a generar instancias de diálogo para avanzar hacia una cultura del cuidado y de la protección. Conscientes de que esta tarea debía ser asumida por todos y todas, invitó – de manera muy especial– a las universidades. Es así que desde la Universidad Católica acogimos este llamado y lo hemos encausado por múltiples vías, una de ellas es este diplomado que comenzamos hoy”.

En sus palabras, el rector destacó que “La formación de laicos y laicas, religiosos y religiosas, es una manera de hacer frente a la que crisis de abuso en entorno eclesial, sin duda, hay mucho que hacer en vistas de la renovación de nuestra Iglesia, pero de seguro, la formación es un punto de partida clave en este proceso”.

Para el vice gran canciller de la Universidad Católica de Chile, Tomás Scherz, “cuando el Papa llamaba a integrar a las universidades, no se trataba de una labor sólo academicista, sino que también labor constructiva. Este es un trabajo en el que estamos involucrados, tanto los sacerdotes como los miembros de nuestras propias parroquias (…) esta es una inquietud en la que tenemos que entrar e insistir con vehemencia: Profesionalizar y crear esta cultura del cuidado y defensa de los más vulnerables”.

Andrea Idalsoaga, delegada episcopal para la Verdad y la Paz del Arzobispado de Sanriago, comentó que: “Ha sido un gran anhelo – desde hace muchos años – poder hacer una formación de calidad, profunda y de reflexión, que construya esta cultura del cuidado y relaciones interpersonales sanas que eviten futuros abusos de conciencia, poder y sexuales”. En ese sentido, resaltó que “es un gran paso que la academia, nuestra Pontifica Universidad Católica, haya querido unirse a nuestro trabajo que hemos hecho en el Arzobispado de Santiago, en este desafío en el que seamos todos corresponsables de esta nueva cultura”.

Además de destacados docentes de la Universidad Católica, el curso contará con la participación de profesores de otros centros de Educación Superior. Entre otros, se harán presentes el sacerdote Daniel Portillo del Centro de Protección de Menores de México (CERCO), Pilar Ramírez, directora del Departamento de Prevención de Abusos y Ana María Celis, presidenta del Consejo Nacional de Prevención de Abusos y Acompañamiento a Víctimas de la Conferencia Episcopal de Chile.

Com informaciones de  Comunicaciones Santiago