El texto recoge la realidad amazónica desde la perspectiva de los pueblos que la habitan Carta del Foro Panamazónico señala que “la defensa de la Selva pasa por aprender a convivir con ella”

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“Llamamos a sentirnos desde las espiritualidades, mirarnos hacia adentro, fortalecer nuestros vínculos y sanar las heridas de nuestro territorio y cuerpo, para ganar la fuerza interior, la unidad que como pueblos requerimos para la comprensión y el accionar conjuntos en el cuidado y defensa de la Amazonía”

“La defensa de la selva amazónica contribuye a la conservación de la vida en el planeta”

"Los pueblos amazónicos y andinos reunidos en el IX FOSPA reafirmamos nuestro compromiso con la vida y la Naturaleza, y llamamos a fortalecer la gran alianza de nuestra diversidad de pensamientos y formas de hacer, por la defensa y el cuidado de la Amazonía"

Asamblea Fospa

Los pueblos amazónicos han tomado conciencia de solo desde la unidad es posible alcanzar una vida digna en la Amazonía. El IX Encuentro del Foro Social Panamazónico – FOSPA, que debería haberse celebrado el pasado mes de marzo en Mocoa, Amazonía colombiana, tenía lugar de forma virtual de 12 a 15 de noviembre. En su carta final, que acaba de ser publicada, se recoge el sentir de la diversidad de los pueblos y realidades que forman parte de la realidad amazónica, y “llamamos a sentirnos desde las espiritualidades, mirarnos hacia adentro, fortalecer nuestros vínculos y sanar las heridas de nuestro territorio y cuerpo, para ganar la fuerza interior, la unidad que como pueblos requerimos para la comprensión y el accionar conjuntos en el cuidado y defensa de la Amazonía”.

La esperanza para la Amazonía surgirá de la vuelta a los orígenes, sostiene en escrito, que llama a superar “una visión neoliberal de saqueo de los bienes de la madre tierra”, ignorando a la población local y atropellando “los derechos humanos y los de la naturaleza”, con el consentimiento de los Estados. Frente a eso se hace ver que “la defensa de la Selva pasa por aprender a convivir con ella”, una dimensión que “no es comprendida ni compatible por la sociedad consumista y de ambición extractivista”, que “actúa sin importarle la destrucción de la casa común”. Frente a ello proponen la ética de la vida, que haga saber que “la defensa de la selva amazónica contribuye a la conservación de la vida en el planeta”.

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La carta denuncia la crisis ambiental, social y política, la incapacidad para enfrentar el Covid-19, “la profundización estructural de las brechas sociales, étnicas y de género”, que se ha hecho más patente en este tiempo de pandemia, haciendo caer en la cuenta de la cada vez mayor presencia de “gobiernos de corte dictatorial”, del incremento de asesinatos de quien cuida de los territorios y la naturaleza. En esa coyuntura, proponen una serie de puntos para avanzar hacia la Amazonía que queremos, divididos en pueblos y culturas en identidad amazónica, territorios y caminos de vida y autonomía y gobierno propio, detallando los pasos que según el FOSPA deberían ser dados. Finalmente, en un camino hacia el buen vivir, especifican algunas tareas que deben ser llevadas a cabo.

El IX FOSPA ha sido un momento para reafirmar el compromiso con la vida y la Naturaleza, y la gran alianza que nace de la diversidad de pensamientos y formas de hacer, en vista de la defensa y el cuidado de la Amazonía. Este es un paso más de un camino iniciado hace 18 años en Santarém, en la Amazonía brasileña, queriendo ser instrumento de denuncia y de propuestas de alternativas.

Esp. Carta de Mocoa by Jesús Bastante on Scribd

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