Vacante desde diciembre de 2021 Papa Francisco nombra obispo de Quixadá (Brasil) a Aurelio Pinto de Sousa
Nacido el 12 de noviembre de 1974, en la ciudad de Guaraciaba do Norte, fue ordenado presbítero el 12 de julio de 2003, incardinándose en la diócesis de Tianguá
La presidencia de la Conferencia Nacional de los Obispos de Brasil (CNBB), ha enviado un saludo al obispo electo de la diócesis de Quixadá, mostrando su alegría por el nombramiento y dándole la bienvenida como futuro miembro de esta Conferencia
Luis Miguel Modino, corresponsal en Latinoamérica
La diócesis de Quixadá (Brasil), vacante desde el 15 de diciembre de 2021, tiene nuevo obispo. Como informa la Conferencia Nacional de los Obispos de Brasil (CNBB), se trata del padre Aurelio Pinto de Sousa, actualmente párroco de la parroquia de Nossa Senhora da Assunção, en Viçosa do Ceará, nombrado este 10 de mayo por el Papa Francisco, sucediendo a Mons. Angelo Pignoli.
Ordenado presbítero el 12 de julio de 2033
Nacido el 12 de noviembre de 1974, en la ciudad de Guaraciaba do Norte, fue ordenado presbítero el 12 de julio de 2003, incardinándose en la diócesis de Tianguá. Realizó un curso de especialización en formación sacerdotal en el Instituto Santo Tomás de Aquino, en Belo Horizonte, em 2007, y en 2009 inició el doctorado en Teología Dogmático-Sacramental en el Pontificio Ateneo Santo Anselmo, en Roma.
Durante su ministerio presbiteral fue Rector del Seminario de Teología Dom Timoteo, en Fortaleza, entre 2003 y 2008, siendo párroco en diferentes parroquias de la diócesis de Tianguá. También ha sido miembro del Consejo Presbiteral, asistente eclesiástico de la Pastoral Litúrgica y representante del Clero. Desde 2003 es profesor de Liturgia, Sacramentos y Mariología en la Universidad Católica de Fortaleza.
Saludo de la presidencia de la CNBB
La presidencia de la Conferencia Nacional de los Obispos de Brasil (CNBB), ha enviado un saludo al obispo electo de la diócesis de Quixadá, mostrando su alegría por el nombramiento y dándole la bienvenida como futuro miembro de esta Conferencia.
Una alegría que se suma a la de todo el pueblo de Dios en la Iglesia particular de Quixadá, que ruega a Dios por un pastor que, "en el espíritu de la sinodalidad", la conduzca en la perspectiva de la comunión, de la participación y de la misión, afirma el texto.
Finalmente, la presidencia de la CNBB pide por intercesión de la Sagrada Familia, a quien está confiada la protección de la diócesis de Quixadá, inspiración para su ministerio, haciendo de la comunidad eclesial, gran familia de familias, lugar de comunión y cenáculos de oración, escuela ampliada del Evangelio.
