Comentario al Evangelio del Tercer Domingo de Cuaresma Mons. Ojea: La samaritana “representa la Iglesia porque es venida del paganismo”

Mons. Oscar Ojea Asamblea Sinodal
Mons. Oscar Ojea Asamblea Sinodal

“Es algo notable en el Evangelio cada vez que Jesús pide agua o dice tengo sed, como en la Cruz, no se la dan

“Jesús no se enoja, Jesús traspasa esta muralla: Si conocieras el don de Dios y quién es el que te dice dame de beber vos le pedirías a él y él te habría dado agua viva”

“Celebramos muchísimo que esté con nosotros presidiendo la Iglesia, rezamos por él especialmente y le pedimos por este sínodo de la sinodalidad que nos va a hacer crecer como cristianos, que nos va a hacer crecer en nuestra responsabilidad por esta Iglesia que tanto amamos”

En su comentario al Evangelio del Tercer Domingo de la Cuaresma, Mons. Óscar Ojea, desde Brasilia, donde ha participado de la Asamblea Sinodal del Cono Sur, ha recordado que “el Evangelio que nos cuenta el encuentro de Jesús con la mujer samaritana”. Según el presidente de la Conferencia Episcopal Argentina, “comienza diciendo que Jesús, fatigado del camino, se sentó junto al pozo; el cansancio de Jesús, Jesús se cansó por nosotros, nunca de nosotros; es un cansancio por buscar cómo transmitirnos, cómo comunicarnos, esta agua viva de la que va a hablar en el Evangelio”.

Jesús y la samaritana

El cansancio de la mujer samaritana

También se preguntó: “¿Cuál es el cansancio de la mujer samaritana?”. A ello responde que “esta mujer había tenido varios maridos y no se sentía querida por ninguno de ellos, por eso su insatisfacción. Pero además el pueblo hablaba mal de ella, entonces iba a buscar agua justo a la hora del mediodía cuando nadie podía verla y, allí a esa hora, se encuentran Jesús y esta mujer que, para San Agustín, representa la Iglesia porque es venida del paganismo, es samaritana”.

El Obispo de San Isidro nos hace ver que “en ese encuentro Jesús inmediatamente le pide agua, Jesús está cansado y tiene sed”. En ese sentido, Mons. Ojea recuerda que “es algo notable en el Evangelio cada vez que Jesús pide agua o dice tengo sed, como en la Cruz, no se la dan”.

Jesús traspasa la muralla

“Y, sin embargo, él ante la negativa de la mujer: ¿Cómo vos me vas a hablar a mí si sos judío y yo soy samaritana? La mujer no escucha la pregunta y la necesidad: dame de beber, sino que la mujer enseguida pone el muro, pone la muralla, pone la cultura que los separaba ancestralmente a judíos y a samaritanos”, relata el obispo argentino. Ante eso, “Jesús no se enoja, Jesús traspasa esta muralla: Si conocieras el don de Dios y quién es el que te dice dame de beber vos le pedirías a él y él te habría dado agua viva”.

A partir de ahí el presidente del episcopado argentino reflexiona diciendo que “el Señor comienza a hablarnos de esa agua nueva que nos limpia, que significa el amor de Dios, que se derrama como una cascada, como un torrente en nuestro corazón, ese torrente hacia arriba y que nos da una vida nueva, el sacramento del Bautismo”. En ese sentido, destaca que “nosotros hemos reflexionado muchísimo en Brasilia sobre el valor de este sacramento que nos hace corresponsables de la vida de la Iglesia”.

Aquel que fue obispo auxiliar del Cardenal Bergoglio, recuerda “los 10 años de la elección al pontificado del Papa Francisco”, este 13 de marzo. Por eso señala que “celebramos muchísimo que esté con nosotros presidiendo la Iglesia, rezamos por él especialmente y le pedimos por este sínodo de la sinodalidad que nos va a hacer crecer como cristianos, que nos va a hacer crecer en nuestra responsabilidad por esta Iglesia que tanto amamos”.

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