Presentes en la 60ª Asamblea General de la CNBB Organismos del Pueblo de Dios: expresión de la sinodalidad ya presente en la Iglesia de Brasil

Representantes de los Organismos del Pueblo de Dios en la Asamblea de la CNBB
Representantes de los Organismos del Pueblo de Dios en la Asamblea de la CNBB

El desafío es "hacer un camino juntos, en sinodalidad», dado que «no hay Iglesia sin comunión y sinodalidad"

Una sinodalidad que "es un desafío, pero es un bello proyecto de Evangelio"

"Todos los organismos quieren ser el signo visible del rostro de la Iglesia que Jesús quiere"

La Iglesia, "como institución, como CNBB, crea más en el papel de los laicos, en este ser sujeto eclesial, en este sujeto maduro que está ahí y que ha conseguido hacer cosas hermosas en la Iglesia y sobre todo en el testimonio efectivo de Jesucristo y en la evangelización de nuestra Iglesia"

La sinodalidad no es algo nuevo en la Iglesia de Brasil, una realidad que también está presente en las asambleas generales del Episcopado, que del 19 al 28 de abril celebra su 60ª edición en Aparecida, donde están presentes los organismos del Pueblo de Dios.

Padre André

Un camino juntos, en sinodalidad

Sus representantes insisten en que la Iglesia en Brasil ya vive esta sinodalidad, pero también reconocen que el desafío es "hacer un camino juntos, en sinodalidad", dado que "no hay Iglesia sin comunión y sinodalidad", según Moema Rodrigues Muricy, presidente de la Conferencia Nacional de los Institutos Seculares de Brasil (CNISB). Se trata de "fortalecer esta experiencia", insiste el padre André Luiz do Vale, presidente de la Comisión Nacional de Presbíteros (CNP), de, siguiendo la petición del papa Francisco hacer "realidad este proceso de escucha, de palabra, de unión, sobre todo para crear esta comunión entre todos", destaca el diácono José Oliveira Cavalcante, presidente de la Comisión Nacional de Diáconos (CND).

Una sinodalidad que "es un desafío, pero es un bello proyecto de Evangelio", según la Hna. Elaine Cordeiro de Souza, presidenta de la Conferencia de Religiosos de Brasil (CRB). Sonia Gomes de Oliveira, presidenta del Consejo Nacional de Laicado de Brasil, también subraya la necesidad de avanzar, insistiendo en que "esta sinodalidad ya está ocurriendo, esta asamblea aquí ya está trayendo cuanto ya podemos participar, tenemos derecho a voz, pero todavía tenemos que dar un paso largo", porque, según ella, "no podemos caminar juntos con algunas restricciones".

Ir. Elaine

Obligación de estar en sintonía

Los institutos seculares de Brasil muestran su adhesión, comunión, participación y gratitud a la Presidencia de la CNBB, pidiendo "la continuidad de este camino en pro de una sociedad más justa, más fraterna en este caminar en común". Un sentimiento presente entre los diáconos, que dicen tener "la obligación de estar en sintonía con todo lo que acontece en la Conferencia Episcopal Nacional". Y es que la sinodalidad "es algo necesario para que las cosas en la Iglesia, o en el mundo en general, lleguen a un punto que sea bueno para todos, que fortalezca a nuestra Iglesia y nos lleve al Reino de Dios", subraya el presidente de la CND.

Hablar de sinodalidad es hablar de comunión, de participación, afirma la Hna. Elaine. La religiosa insiste en que "todos los organismos quieren ser el signo visible del rostro de la Iglesia que Jesús quiere". Para ello, es necesaria "una mayor apertura", pide Sonia Gomes de Oliveira, que subraya que "el laicado está en la base, puede trabajar, puede tener un papel organizativo en las parroquias, en las diócesis, pero cuando se trata del gran espacio de decisión, todavía no tenemos ese poder de decisión".

Sonia Gomes Oliveira

Diversidad que enriquece

Los presbíteros de Brasil, en la voz de su presidente, dicen que van a "fortalecer aún más esta realidad, para caminar juntos con el pueblo de Dios, con nuestros obispos". Pero también piden ser escuchados, "tanto por los obispos como también por el pueblo de Dios". Una sinodalidad a construir en una Iglesia "que tiene muchas tendencias", según la presidenta de la CRB, que insiste en que "esto es muy bueno, porque es la eclesialidad, es la universalidad de la Iglesia". Una sinodalidad que "vivimos con mucha cercanía, intento de comunión, apertura y creyendo que el Espíritu, la Divina Ruah, hará su buena obra por el bien de los pobres, por el bien de la Iglesia", subrayó.

Pidiendo romper algunas barreras y superar el clericalismo, Sonia Gomes de Oliveira espera que la Iglesia, "como institución, como CNBB, crea más en el papel de los laicos, en este ser sujeto eclesial, en este sujeto maduro que está ahí y que ha conseguido hacer cosas hermosas en la Iglesia y sobre todo en el testimonio efectivo de Jesucristo y en la evangelización de nuestra Iglesia".

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