El Papa Francisco ha donado en los últimos días 6 respiradores artificiales a la diócesis de Carolina, en el estado brasileño de Maranhão, para ayudar en la lucha contra el coronavirus. Según el obispo de la diócesis, Mons. Francisco Lima Soares, los aparatos se destinaron a los municipios de Montes Altos (2), Estreito (2) y Carolina (2), los más necesitados.

En Montes Altos, los aparatos fueron entregados a la dirección de la Casa Alivio del Sufrimiento, hospital que es la diócesis de Carolina. “Este hospital tiene recursos precarios para atender, especialmente en estos tiempos de pandemia“, dijo Mons. Francisco.

En Estreito, por ser el municipio más poblado de la diócesis, el obispo afirmó que la demanda es grande y que no había respiradores. “Esto era de gran importancia para que estas personas, tanto en las ambulancias como en los hospitales, pudieran recibir este equipamiento“, explicó Mons. Lima Soares.

También la sede de la diócesis, Carolina, recibió dos respiradores, dado que “también había ineficacia e inexistencia de estos dispositivos allí, por lo que los enviamos“, añadió Mons. Francisco.

“Todo el mundo estaba muy contento de haber recibido este equipo, que es fácil de manejar, y también los médicos estaban contentos porque saben lo difícil que es transportar a los pacientes a otros municipios, así que recibimos con gran alegría y agradecemos al Papa, a la Nunciatura y a la CNBB que se encargaron de que recibiéramos estas donaciones“, insistía el obispo.

Según la Limosnería Apostólica, el organismo vaticano encargado de las donaciones y la caridad, con el acto el Papa “expresa su cercanía a los países afectados por la pandemia del Covid-19, especialmente a los que tienen sistemas sanitarios con mayores dificultades“.