La diócesis de Januária, en el estado brasileño de Minas Gerais, tiene nuevo obispo. Se trata de Monseñor Dorival Souza Barreto Júnior, hasta el momento obispo auxiliar de la Arquidiócesis de Salvador de Bahia. El nombramiento del Papa León XIV se ha dado a conocer este miércoles 18 de junio, como recoge la web de la Conferencia Nacional de los Obispos de Brasil (CNBB).

Nombrado obispo en 2020

Nacido el 10 de marzo de 1964 en Jequié, estado de Bahia. Fue ordenado diácono el 19 de julio de 1987 y sacerdote el 10 de enero de 1988. Es licenciado en Filosofía y Teología, tiene un máster en Liturgia por el Pontificio Instituto Litúrgico de Roma y es doctor en Teología Dogmática por la Pontificia Universidad Gregoriana, también en Roma.

En la diócesis de Montes Claros, en el estado de Minas Gerais, fue vicario, administrador parroquial y párroco, así como canciller, ecónomo, miembro de los Consejos Presbiteral, Económico y Pastoral, del Colegio de Consultores y párroco de la Catedral Metropolitana de Nuestra Señora Aparecida. Ha sido profesor de Liturgia, Arte Sacro, Prácticas Litúrgicas y Latín.

Fue nombrado obispo titular de Tindari y obispo auxiliar de la archidiócesis de Salvador el 4 de noviembre de 2020, asumiendo como lema episcopal: “Ite et vos” (Id también vosotros – Mt 20,7). Fue ordenado obispo el 3 de enero de 2021 y presentado como obispo auxiliar de Salvador el 6 de febrero del mismo año.

Mensaje de la Presidencia de la CNBB

La presidencia de la CNBB ha enviado un mensaje a Monseñor Dorival Souza Barreto Júnior, en el que muestra su alegría por “su nombramiento por el Papa León XIV como nuevo obispo de la diócesis de Januária”. En nombre del episcopado brasileño, la presidencia le expresa su fraternal saludo y sus oraciones en este momento tan significativo de su misión episcopal.

El texto recuerda las palabras del Papa León XIV al episcopado italiano proferidas el 17 de junio de 2025: “Este es el primer gran compromiso que debe motivarnos: llevar a Cristo en las venas de la humanidad, renovando y compartiendo la misión apostólica: ‘Lo que hemos visto y oído, os lo anunciamos’ (1 Jn 1,3)”.

Finalmente, la presidencia de la CNBB muestra su confianza para que su presencia en la diócesis de Januária “sea un signo de esperanza y renovación para los fieles, sacerdotes, religiosos y laicos que ahora le acogen como pastor y hermano”. Para ello piden que “Nuestra Señora de los Dolores, patrona de la diócesis de Januária, le guíe con sabiduría y valentía e interceda por su ministerio, fortaleciéndole en cada paso de esta nueva misión”.