Con motivo de la canonización de San José Allamano Cada vez más amenazados, el parlamento italiano escucha la voz de los indígenas de la Amazonía

Derechos de los pueblos indígenas en el Parlamento italiano
Derechos de los pueblos indígenas en el Parlamento italiano

El embajador destacó la importancia de participación de la Iglesia para ayudar al gobierno a dar a los pueblos la posibilidad de acceder a la ciudadanía y a la vida verdadera, para no ser un pueblo abandonado

La Tierra Indígena Yanomami se ha convertido en un lugar de delincuencia atrayendo incluso a personas de otros países

la presión internacional es fundamental, de ahí la importancia de la petición del Papa Francisco en el Ángelus del pasado domingo

Desarrollo que destruye nuestra casa común para concentrar la riqueza en manos de unos pocos

Exigió al actual gobierno más avances en la demarcación de territorios, lo que no está ocurriendo debido a la presión del poder económico

La Cámara de Diputados de Italia acogió el martes 22 de octubre, con motivo de la canonización de San José Allamano, un acto sobre los pueblos indígenas de la Amazonía. El Papa Francisco, al término de las canonizaciones de este domingo, pidió a las autoridades proteger al pueblo Yanomami, mensaje que fue mostrado al inicio del evento. Se recordó la preocupación del Papa Francisco por la Amazonía, algo presente en Querida Amazonía.

Lucha Indígena en el parlamento italiano

Sensibilizar la comunidad internacional

El reto es sensibilizar al Parlamento italiano y a la comunidad internacional sobre la necesidad de proteger a los pueblos indígenas, una cuestión que va más allá de las religiones, según el diputado italiano Fabio Porta, organizador de la reunión. Presentó la realidad de la Amazonía, hablando de la importancia de la COP 30, que se celebrará en Belém do Pará en 2025, una oportunidad para que la humanidad perciba el papel la Amazonía y su papel en el cambio climático.

Denunció la falta de respeto a los derechos garantizados en la Constitución brasileña de 1988. Incluso con un gobierno sensible, los intereses políticos y económicos hablan más más fuerte. La gente está muriendo en la Amazonía a causa de la deforestación y la acción de los mineros ilegales, dijo Porta. Pidió al gobierno italiano que asuma su responsabilidad con respecto al oro que sale de la Amazonía y las graves consecuencias que provoca. En la festividad de San Juan Pablo II, recordó sus palabras: “los holocaustos conocidos continúan aún hoy en la Amazonía”.

Atención a los pueblos indígenas

El embajador de Brasil en Italia, Renato Mosca de Souza, informó sobre la crítica situación de abandono total, hambre y enfermedad, a la que se enfrentaba el pueblo yanomami, una situación presente en otros pueblos indígenas. En vista de ello se creó el Ministerio de los Pueblos Indígenas para hacer frente a este problema, para llevar la letra de la ley a la realidad. El embajador destacó la importancia de participación de la Iglesia para ayudar al gobierno a dar a los pueblos la posibilidad de acceder a la ciudadanía y a la vida verdadera, para no ser un pueblo abandonado. Mosca de Souza destacó la importancia del G20 que en noviembre se celebrará en Río de Janeiro, que abordará la lucha contra el hambre y la pobreza, un compromiso del gobierno de Lula en un país un país que salió del mapa del hambre de la FAO en 2014 y que en 2024 tiene 30 millones de brasileños que padecen hambre o inseguridad alimentaria.

En vista de ello, mostró el compromiso del gobierno brasileño de enfrentar esta situación inaceptable, porque “el problema no es de producción, sino de distribución”. Él denunció los cuatro años de gobierno negacionista, que abandonó a los pueblos de la Amazonía. Frente a esto, dijo que el único motivo de cualquier gobierno es trabajar por el pueblo. El embajador defendió el desarrollo sin abandonar la dimensión social y la sostenibilidad. Desde esta perspectiva habló de la COP 30 como un momento para afirmar esta idea y este compromiso. Agradeció al Gobierno italiano su apoyo a Brasil en cuestiones relacionadas con el cambio climático y el hambre.

Julio Ye´kwana

Varias explotaciones en la tierra indígena yanomami

El líder indígena de la Tierra Indígena Yanomami, reconocida en 1992 por la presión indígena e internacional, Julio Ye'kwana, mostró la realidad de su territorio, del tamaño de Portugal, donde viven 33.000 personas en 350 comunidades, con 7 lenguas y 10 asociaciones para defender los derechos de los pueblos indígenas. Denunció las amenazas a las que seenfrentan: la minería ilegal, fomentada por el gobierno anterior y cada vez más sofisticada, la devastación del territorio, la contaminación de los ríos, la deforestación, la explotación sexual y el tráfico de armas y drogas. Dijo que la Tierra Indígena Yanomami se ha convertido en un lugar de delincuencia atrayendo incluso a personas de otros países.

Los indígenas están siendo reclutados, han comenzado a esclavizar a los indígenas, aumentaron diversas enfermedades y la malnutrición, pues los padres ya no podían sembrar, porque estaban atrapados en las minas o sufrían de malaria. Ante la exportación de oro a Europa, el líder indígena hizo una petición de ayuda, pidiendo que se rastree el oro para saber de dónde viene. Los yanomami se han aliado con los kaiapó y los Munduruku, los más afectados por la minería ilegal, para ganar fuerza en la lucha. Habló del Marco Temporal, que va a ser un genocidio de los pueblos indígenas, y dijo que los yanomami quieren vivir, practicar su cultura, algo que el está impidiendo.

La presión internacional es fundamental

Esta realidad fue analizada en profundidad por el padre Corrado Dalmonego, antropólogo italiano y gran conocedor de este pueblo, que ha vivido muchos años en la Misión Catrimani, donde se produjo el milagro que le llevó a reconocer la santidad del fundador de su congregación. Reconoció las mejoras realizadas por el gobierno, pero siguen siendo insuficientes. Ante la imposibilidad de seguir viviendo en una tierra devastada, subrayó que la presión internacional es fundamental, de ahí la importancia de la petición del Papa Francisco en el Ángelus del pasado domingo.

Acto en defensa de los Pueblos Indígenas

La riqueza de unos pocos por encima de la vida de los indígenas

“La cuestión indígena en Brasil es muy grave”, según el arzobispo de Porto Velho, Mons. Roque Paloschi, quien denunció que los pueblos indígenas de Brasil nunca han sido reconocidos como personas. Los artículos 231 y 232 de la Constitución brasileña de nunca se tomaron en serio, y después de 40 años sólo se ha reconocido un tercio de las tierras indígenas, algo que debería haberse hecho en cinco años. También expresó su preocupación por el Marco Temporal e hizo hincapié en la importancia del acto en la Cámara de Diputados italiana y la presencia del embajador, denunciando el desarrollo que destruye nuestra casa común para concentrar la riqueza en manos de unos pocos. El arzobispo mostró su oposición a quienes ponen el monocultivo por encima de la vida de los indígenas. Aun así, dijo que no había perdido la esperanza: “está oscuro, pero canto”, citando al poeta Tiago de Mello.

Necesidad de más avances del actual gobierno

 El secretario ejecutivo del Consejo Indígena Misionero, Luis Ventura, señaló que las Tierras Indígenas están en manos del poder económico, que no lo que la Constitución de 1988 dice sobre los pueblos indígenas, y que se están desconfigurando sus derechos. Exigió al actual gobierno más avances en la demarcación de territorios, lo que no está ocurriendo debido a la presión del poder económico. Igualmente se refirió al aumento exponencial de la violencia contra los pueblos indígenas, dando algunos ejemplos. Según él, el Marco Temporal hace inviable la demarcación de las Tierras Indígenas. Luis Ventura ve en la vida de San José Allamano la invitación a cuidar la vida. También destacó la resistencia y espiritualidad de los pueblos indígenas que anima al CIMI a defenderlos, y que es necesario, en vista del cuidado del medio ambiente, demarcar las tierras indígenas.

Parlamento italiano

Vale la pena sembrar

Finalmente, Roque Paloschi dijo creer que vale la pena sembrar, y que, combinando la experiencia de tantos lugares del mundo, es posible construir nuevos caminos, algo que ve en la canonización de San José Allamano y el milagro ocurrido en la Amazonía. El arzobispo de Porto Velho agradeció al pueblo italiano su preocupación por las cuestiones climáticas y en relación con los pueblos indígenas.

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