El Papa les recibe y promete que la orden se reunirá con ellos Francisco, "visiblemente horrorizado", pide perdón a un grupo de víctimas de los combonianos en el Reino Unido

El Papa recibió a las víctimas de los combonianos
El Papa recibió a las víctimas de los combonianos Christopher Lamb

"El Papa se mostró realmente conmovido cuando nos pidió perdón por el modo en que fuimos tratados y dijo que esta tarde llamaría personalmente al superior de los combonianos para pedirle que se reuniera con nosotros: un encuentro pastoral, sin abogados, con el corazón abierto"

Los abusos se produjeron en el seminario de Mirfield durante las décadas de 1960 y 1970

El Papa Francisco ha pedido "perdón" en nombre de la Iglesia a un grupo de hombres del Reino Unido que sufrieron abusos sexuales cuando eran niños por parte de frailes combonianos y sus empleados laicos, y les ha prometido que hoy mismo llamará por teléfono al superior general de la orden religiosa para pedirle que les reciba.

"El Papa escuchó paciente y atentamente nuestros relatos y se mostró visiblemente horrorizado y conmocionado por algunos de los ejemplos", afirmó Bede Mullen, portavoz del grupo, a askanews.

"Muchos de nosotros hemos procesado los abusos que hemos sufrido, el problema es la negación continua que hemos sufrido por parte de los combonianos, incluso ahora", dice Bede. "El Papa se mostró realmente conmovido cuando nos pidió perdón por el modo en que fuimos tratados y dijo que esta tarde llamaría personalmente al superior de los combonianos para pedirle que se reuniera con nosotros: un encuentro pastoral, sin abogados, con el corazón abierto.

El grupo procedía de Inglaterra, Gales, Escocia e Irlanda, y estuvo acompañado por el cardenal Vincent Nichols, arzobispo de Westmnster, y el obispo Marcus Stock de Leeds, donde se encuentra el seminario menor de Mirfield en el que se produjeron los abusos en las décadas de 1960 y 1970.La audiencia de esta mañana duró casi dos horas.

Los ocho hombres, todos de entre 60 y 70 años, contaron sus historias de abuso que habían sufrido. La audiencia, que tuvo lugar en la biblioteca del Palacio Apostólico, fue "emotiva", dice Mullen, y muchos recordaron sus experiencias "con lágrimas en los ojos". Al final, Bede Mullen hizo un balance de la situación compartida por todo el grupo.

Incluso antes de la audiencia, el grupo de supervivientes de los combonianos ingleses había dejado claro que le contarían al Papa tanto los abusos que habían sufrido como la negativa de los combonianos a pedir perdón y atender a las víctimas.

Lo que el grupo reclama es el reconocimiento público de la insuficiencia de la respuesta, la atención pastoral y el cese del provincial inglés y del responsable local de la protección de la infancia. "La respuesta que hemos recibido de la Orden de los Combonianos hasta la fecha puede caracterizarse como poco cristiana, carente de empatía y no acorde con las enseñanzas del Santo Padre y del Evangelio". "Ya somos ancianos, tenemos entre 60 y 70 años", dice Bede Mullen, "sólo queremos estar en paz antes de dejar esta tierra".

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