Se autoriza la participación de un coro, respetando una distancia mínima de cinco metros El Gobierno belga autoriza las misas al aire libre

Iglesias cerradas
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Como parte del “plan al aire libre”, el gobierno belga ha comunicado un nuevo protocolo elaborado conjuntamente con los representantes de los diferentes cultos religiosos presentes en el país

Las celebraciones solo pueden realizarse en espacios privados como el jardín de una iglesia por ejemplo y con la condición de que estos espacios no colinden con la vía pública

A partir de este sábado, 8 de mayo, se autorizan las celebraciones religiosas al aire libre en Bélgica, bajo unas condiciones y dentro de unos límites detallados en un protocolo publicado por las autoridades el pasado 6 de mayo.  Como parte del “plan al aire libre”, el gobierno belga ha comunicado un nuevo protocolo elaborado conjuntamente con los representantes de los diferentes cultos religiosos presentes en el país.

El cardenal Jozef De Kesel, al Arzobispo Metropolitano de Malinas-Bruselas y presidente de la Conferencia episcopal Belga tras la firma del documento declaró que el “plan externo se aplica sea al  ejercicio individual que colectivo del culto siempre que estén organizados al aire libre".

Si bien el comunicado del gobierno no especifica la cantidad exacta de personas autorizadas para participar en las celebraciones al aire libre, una nota publicada en el portal de la Iglesia belga, explica que las iglesias han propuesto la cifra de 50 personas, que no incluyen a ministros de religión y niños menores de 13 años.  Mientras se espera la confirmación del número de asistentes, se subraya que las celebraciones solo pueden realizarse en espacios privados como el jardín de una iglesia por ejemplo y con la condición de que estos espacios no colinden con la vía pública.

El nuevo protocolo permite la realización de varios servicios durante el día, de modo que se pueda aumentar el número de fieles. Se autoriza la participación de un coro, respetando una distancia mínima de cinco metros del público. Igualmente, se puede instalar un altar o un ambón que también deben estar a cinco metros de distancia. Las celebraciones eucarísticas, los demás sacramentos  o encuentro de oración se realizarán como al interior de los templos con la dignidad y la serenidad requeridas.

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