Zuppi y Baturi rezan y escuchan, durante tres horas, a los supervivientes La cúpula de la Iglesia italiana recibe a las víctimas de la pederastia clerical

Zuppi, con algunas víctimas
Zuppi, con algunas víctimas CEI

Obispos y víctimas crearán un Observatorio para mejorar las medidas de formación y prevención que llevan a cabo las iglesias italianas

"Solo escuchar verdaderamente el dolor de las personas que han sufrido este crimen nos abre a la solidaridad y nos desafía a hacer todo lo posible para que el abuso no vuelva a ocurrir"

Tres horas de oración, escucha y compromiso. El presidente de la Conferencia Episcopal italiana, Matteo Zuppi, y su secretario general, Giuseppe Baturi, se reunieron ayer, en la sede de la CEI, con decenas de víctimas, familiares y supervivientes de abusos perpetrados en el ámbito eclesial "en tiempos recientes y pasados", según una nota de la agencia SIR.

Durante el encuentro, que se desarrolló en "un ambiente sereno pero intenso", cada víctima "compartió su propia historia de dolor al tiempo que expresaba el deseo de ayudar y acompañar a la Iglesia en Italia para que estos episodios no se repitan, y para proteger mejor a los menores y adultos vulnerables", apunta la CEI.

La víctima, "herido grave"

Y es que, tal y como apunta el episcopado italiano, "la víctima debe ser reconocida como herido grave y escuchada con empatía, respetando su dignidad. Esta prioridad es ya un primer acto de prevención porque solo escuchar verdaderamente el dolor de las personas que han sufrido este crimen nos abre a la solidaridad y nos desafía a hacer todo lo posible para que el abuso no vuelva a ocurrir".

El portavoz de los obispos italianos, Vincenzo Corrado, añadió que la experiencia vivida "representa la primera etapa hacia la constitución de un grupo operativo, formado por víctimas de abusos en el ámbito eclesial y sus familias", que supondrá "una especie de Observatorio, integrado por personas que generosamente han dado su voluntad de ofrecer, a título personal y en la máxima libertad, una contribución proactiva para mejorar y hacer más eficaces las actividades de formación y prevención que llevan a cabo las Iglesias en Italia a través de la red territorial de servicios de protección de la infancia”. 

“Para subrayar la importancia que los obispos italianos atribuyen a la participación de las víctimas en los procesos de elaboración de cursos preventivos y de formación, el Observatorio dependerá directamente de la Presidencia de la CEI, en particular del cardenal presidente, y reuniones periódicas serán organizadas por la Secretaría General. Estos encuentros, precedidos por un momento de oración, se centrarán en la discusión sobre la formación y prevención del abuso de menores y adultos vulnerables implementada por la Iglesia en Italia”, concluyó Corrado.

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