El arzobispo de Marsella sostiene ante el Papa que "la cuenca puede decir mucho a la Iglesia" Jean-Marc Aveline: "La Iglesia necesita un Sínodo sobre el Mediterráneo"

“Estamos ante una ‘peregrinación mediterránea’ del Papa Francisco que revela cómo el Mediterráneo puede hablar a toda la Iglesia y tiene especificidades singulares que requieren una profundización teológica, pastoral y misionera”. Con esta elocuencia se expresaba Jean-Marc Aveline, arzobispo de Marsella, en una entrevista concedida al portal católico Avvenire. 

La actividad del papa argentino a lo largo de la cuenca mediterránea durante los últimos años ha sido remarcable: visitas a Lampedusa y Lesbos; encuentro religioso en Bari por la paz en Oriente Medio; parada en Nápoles para hablar de la teología del Mediterráneo y nueva visita a Bari para clausurar la reunión de los obispos de la cuenca reunidos por la CEI por primera vez en la historia. Estos precedentes sirvieron al prelado francés para lanzar una idea al Papa durante la audiencia privada que tuvo hace unas semanas en el Vaticano. “Presenté al Pontífice la hipótesis de un Sínodo de los Obispos sobre el Mediterráneo, dado que Francisco quiso recientemente uno para la Amazonia”, detalla Aveline en la entrevista.

“A raíz del Foro Interreligioso del G20 celebrado en Bari, surgieron como prioridades el ecumenismo, la emergencia humanitaria, el diálogo interreligioso, pero también el abrazo fructífero entre Oriente y Occidente. Detrás de estas dimensiones está la necesidad de una reflexión eclesial. Así que me parece que un proceso sinodal es la mejor manera de discernir lo que el Espíritu pide a nuestras comunidades”, explica Avvenire este prelado nacido en Argelia hace 62 años.

Aveline fue elegido por el Santo Padre en 2019 para liderar una Iglesia de frontera como es la marsellesa y participó en el reciente encuentro online organizado por la Conferencia Episcopal Italiana, que ha convocado a algunos obispos de la cuenca para organizar la nueva cumbre sobre el Mediterráneo que se celebrará en Florencia entre febrero y marzo de 2022.

Un proyecto de teología mediterránea

Preguntado por su audiencia con Francisco, el prelado confiesa que vivió el encuentro como un momento espiritual de discernimiento en el que pudo “someter al Papa algunas percepciones que había madurado”. “Fue un diálogo de pastor a pastor. Y me gusta subrayar lo importante que es para un obispo beneficiarse de ese apoyo paterno”, añade.

“Vivimos en torno a este mar ‘entre tierras’ que representa un vínculo peculiar entre África, Europa y Oriente y que está marcado por tradiciones de intercambio, por un complejo cosmopolitismo que se toca con la mano en sus orillas, por viejas y nuevas heridas. Todo esto aparece como el punto de partida de un proyecto de teología mediterránea”, asegura Aveline.

“Un camino que analiza y es testigo de cómo en este rincón del mundo se han formado los credos que aquí han brotado dialogando entre sí, cómo el ser humano ha adquirido una definición original, cómo se ha desarrollado un fructífero encuentro entre culturas, cómo las crisis humanitarias o ecológicas afectan también a los fundamentos de nuestra vida espiritual. De hecho, en el Mediterráneo, la teología se encuentra con retos que cuestionan a la Iglesia y que necesitan encuentros regulares y relaciones constantes para ser afrontados”, asegura el prelado francés.