La Comunidad de Católicos Integrados fue aprobada por el Papa emérito siendo arzobispo de Münich Ratzinger se distancia de una comunidad religiosa a la que estuvo estrechamente unido tras acusaciones de abuso psicológico

Ratzinger, en su primera misa como arzobispo de Münich
Ratzinger, en su primera misa como arzobispo de Münich

La comunidad, que no está colaborando con la investigación, está acusada de abuso espiritual y de generar un sistema de dependencia económica y financiera. Así, sus miembros no podían decidir libremente dónde vivir o con quién casarse

El Papa emérito admite "terribles distorsiones en la fe" y lamenta que se haya dado la impresión de que las actividades de la comunidad "fueron aprobadas por mí"

Se llaman la Comunidad de Católicos Integrados (IG en alemán), Surgidos en 1948 como “un lugar para un cristianismo luminoso e íntegro”, fueron reconocidos en 1978 por el entonces arzobispo de Münich, Joseph Ratzinger. Ahora, son investigados canónicamente por abuso psicológico y control excesivo sobre sus miembros, y el Papa emérito ha decidido distanciarse de ellos.

Benedicto XVI mantuvo, durante años, “estrechos vínculos” con la comunidad, según informa ‘Herder Korrespondenz’. Ahora, el Papa emérito admite que “al principio no me di cuenta de que al intentar moldear las cosas en la vida cotidiana de manera integral basada en la fe, eran posibles terribles distorsiones de la fe”. “Lamento profundamente que esto haya dado la impresión de que todas las actividades de la comunidad fueron aprobadas por mí", recalca.

Dependencia económica y financiera

Es más: Ratzinger sostiene haber “sido engañado” sobre “algunos mecanismos internos” de la comunidad, acusada de abuso espiritual y de generar un sistema de dependencia económica y financiera. Así, sus miembros no podían decidir libremente dónde vivir o con quién casarse.

El informe de los visitadores apostólicos de la diócesis de Münich sostiene que, incluso, era la Comunidad de Católicos Integrados la que podía decidir sobre una separación o sobre si una pareja podía o no tener hijos. El documento final describe un sistema de dependencia psicológica y financiera perfectamente planeado.

El Papa emérito, Joseph Ratzinger

Por el momento, la comunidad no ha colaborado con la investigación, hasta el punto de que la diócesis advierte de que tomará medidas, que podrían llegar hasta la disolución del grupo.

"Acusaciones completamente infundadas"

En el sitio de internet de IG, que en la actualidad aparece deshabilitada, la comunidad describía las acusaciones del informe interno como “completamente infundadas”.

Según la revista “Herder Korrespondenz”, un miembro del grupo afirmó que la comunidad habría decidido cesar por completo sus “actividades como asociación de la Iglesia”. Sin embargo, la investigación de la publicación alemana muestra que el grupo tiene pensado continuar sus actividades “bajo una nueva forma legal”.

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