"Hubo falta de compasión, falta de empatía", reconoce el cardenal de Colonia Woelki admite un "encubrimiento sistemático" de los abusos en su diócesis, pero se niega a dimitir

El cardenal Woelki, en la catedral de Colonia
El cardenal Woelki, en la catedral de Colonia

"Hubo caos, y un sistema de silencio, secreto y descontrol (...). Eso nunca debería haber sucedido"

"Podría y debería haber informado del caso a Roma. Pero no lo hice, hubiera sido mejor de otra manera", admitió el cardenal, quien dirige la diócesis desde 2014. "No dimitiré, sería demasiado fácil: una renuncia así sería sólo un símbolo, que duraría poco"

Hubo "encubrimiento sistemático" de los abusos sexuales en la diócesis de Colonia. "Hubo caos, y un sistema de silencio, secreto y descontrol (...). Eso nunca debería haber sucedido". El cardenal de la diócesis alemana, Rainer María Woelki, reconoce los errores, que provocaron decenas de casos de pederastia impunes en su diócesis, entre 1975 y 2018. Pero no va a asumir responsabilidades, no va a dimitir. 

"Podría y debería haber informado del caso a Roma. Pero no lo hice, hubiera sido mejor de otra manera", admitió el cardenal, quien dirige la diócesis desde 2014. "No dimitiré, sería demasiado fácil: una renuncia así sería sólo un símbolo, que duraría poco", argumentó. 

Tras la publicación del informe, que identificó  al menos 314 casos de abusos, identificando a 202 presuntos autores, Woelki compareció ante los medios, admitiendo que "hubo falta de compasión, en general hubo falta de empatía". El estudio, muy crítico con la actitud de la jerarquía de la Iglesia, extrañamente exonera a Woelki.

Protestas contra abusos sexuales a menores por parte de la Iglesia Católica en Alemania, ante la Catedral de Colonia.

Los autores del análisis sí consideraron que tanto el arzobispo de Hamburgo, Stefan Heße (quien presentó su renuncia prácticamente al instante), y el fallecido cardenal Joachim Meisner, arzobispo de Colonia desde 1989 hasta 2014, faltaron a su deber en relación con esos abusos en 11 y 24 casos, respectivamente.

El abogado Björn Gercke, uno de los responsables del informe, explicó que al elaborarlo se constató que muchos documentos fueron destruidos en aplicación de las normas del Derecho Canónico.

El cardenal Woelki se refirió al caso del sacerdote de Düsseldorf Johannes O., al que se atribuyen abusos que el arzobispo presuntamente encubrió y dijo que el informe constata que él mismo actuó "de manera diligente y legal".

Sin embargo, "podría y debería haber informado del caso a Roma. Pero no lo hice, hubiera sido mejor de otra manera", admitió el purpurado. "En el futuro haré todo lo posible para asegurarme de que no se produzcan más errores", prometió.

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