Roger Vangheluwe reconoció haber abusado de dos de sus sobrinos El obispo de Amberes denuncia que Roma no ha condenado, trece años después, a un prelado que admitió ser un pederasta

Un momento de la entrevista con Bonny
Un momento de la entrevista con Bonny captura de pantalla

"Los obispos (belgas) llevamos años pidiendo una reacción. Las cartas están ahí, las discusiones. Todo anotado en listas. ¿Cuándo tendremos una reacción? ¿Y por qué no la tenemos?"

Vangheluwe se trasladó a una comunidad católica en el centro de Francia, sin que oficialmente haya sido castigado por sus crímenes. De hecho, nunca fue procesado, al haber prescrito los abusos

El obispo de Amberes, Johan Bonny, se planta, y exige al Vaticano respuestas y reacciones ante el escándalo de quien fuera arzobispo de Brujas, Roger Vangheluwe, involucrado en un caso de abusos sexuales hace 13 años, y cuya condena canónica todavía no ha sido confirmada por la santa Sede.

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En una entrevista en la cadena VRT recogida por Ap, Bonny criticó que, pese a las pruebas, Roma no haya expulsado todavía al prelado, que admitió haber abusado sexualmetne de al menos dos menores, sobrinos suyos para más señas. "Nosotros, los obispos (belgas), llevamos años pidiendo una reacción. Las cartas están ahí, las discusiones. Todo anotado en listas. ¿Cuándo tendremos una reacción? ¿Y por qué no la tenemos?", denunció el prelado.

"Nuestra Conferencia Episcopal lleva años pidiendo a Roma que haga esto, a través del nuncio (enviado papal) y directamente en Roma", lamentó Bonny, quien añadió que en noviembre del año pasado, durante la visita Ad Limina, "volvimos a plantearlo, y después de la enésima vez , la reacción de Roma no es diferente".

En 2011, Vangheluwe habló de sus abusos sexuales como "un pequeño juego", que no implicaba "sexo duro" y negó ser un pedófilo, ya que "nunca sintió la menor atracción por un niño".  Tratando de convertir a la víctima en cómplice, recalcó que "tenía la fuerte impresión de que a mi sobrino no le importaba en absoluto. Al contrario".

Al cabo de los años, Vangheluwe se trasladó a una comunidad católica en el centro de Francia, sin que oficialmente haya sido castigado por sus crímenes. De hecho, nunca fue procesado, al haber prescrito los abusos. 

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