Más de 100 grupos se disputan el control de las tres provincias del este congoleño Las '3T' de la 'codicia' en RD del Congo: Tin o estaño, Tungsteno y Tantalio

Mina en RD del Congo
Mina en RD del Congo

Las «3T» - casiterita (tin o estaño), wolframita (tungsteno), coltán (tantalio) - son los principales recursos depredados en el este de la República Democrática del Congo, según los documentos de los distintos organismos de la ONU

“África, no es una mina que explotar o una tierra que saquear” ha reiterado ayer, 31 de enero, el Papa Francisco en el Jardín del Palacio de la Nación en Kinshasa, al reunirse con las autoridades congoleñas

Una explotación sofisticada y diversa que se puede representar como un árbol, según el activista Pierre Kabeza: Las raíces son las multinacionales de lasgrandes potencias, el tronco son los vecinos de RDC, que reciben ayuda de las grandes potencias, y las ramas o grupos guerrilleros que operan en territorio congoleño

En la práctica, son más de 100 los grupos que se disputan el control de las tres provincias del este congoleño (Kivu del Norte, Kivu del Sur e Ituri). Y son también los que cometen crímenes contra la población

(Agencia Fides).- Las «3T» - casiterita (tin o estaño), wolframita (tungsteno), coltán (tantalio) - son los principales recursos depredados en el este de la República Democrática del Congo, según los documentos de los distintos organismos de la ONU que desde hace años elaboran informes sobre el tema.

“África, no es una mina que explotar o una tierra que saquear” ha reiterado ayer, 31 de enero, el Papa Francisco en el Jardín del Palacio de la Nación en Kinshasa, al reunirse con las autoridades congoleñas, la sociedad civil y el Cuerpo Diplomático (véase Fides 31/1/2023). El Congo desde el comienzo de la colonización, iniciada como iniciativa privada de un gobernante católico europeo, el Rey de Bélgica, siempre se ha visto bajo esta luz. Explotación que también afectó a sus habitantes según denunciaron los cronistas de la época, uno de los cuales fue el escritor estadounidense Mark Twain.

Discurso de Francisco  a las autoridades congoleñas

Una explotación que hoy todavía continúa pero de forma más sofisticada y diversificada. Como ha dicho el activista congoleño de derechos humanos Pierre Kabeza (véase Fides 26/1/2023), la explotación de los recursos congoleños “puede representarse como un árbol cuyas raíces son las grandes potencias del mundo, junto con sus multinacionales. El tronco del árbol son los países vecinos de la RDC (Ruanda y Uganda) que reciben ayuda de las grandes potencias y, por último, las ramas, son los diversos grupos guerrilleros que operan en territorio congoleño. La savia que nutre el árbol son los intereses económicos”.

"Además de las '3T' hay oro, diamantes, cobalto y cobre, pero también la fauna salvaje, el carbón y la madera, así como el cannabis… y las personas explotadas"

En la práctica, son más de 100 los grupos que se disputan el control de las tres provincias del este congoleño (Kivu del Norte, Kivu del Sur e Ituri). Y son también los que cometen crímenes contra la población civil para explotar ilegalmente los recursos naturales. Además de las «3T» hay oro, diamantes, cobalto y cobre, pero también la fauna salvaje, el carbón y la madera, así como el cannabis. Mercancías que luego se llevan a Ruanda, Burundi y Uganda y de estos países a los mercados internacionales.

Objetivo M23: mantener el 'Pequeño Norte'

El curso de las operaciones militares de los distintos grupos rebeldes (pero también del ejército congoleño, cuyas unidades no son ajenas al tráfico ilegal) refleja el mapa de recursos de la zona. Como señala el último informe enviado a la Agencia Fides por la Red por la Paz en el Congo, el resucitado Movimiento del 23 de Marzo (M23), tiene entre sus objetivos “el de mantener el ‘Pequeño Norte’ de Kivu del Norte, es decir, la ciudad de Goma y los territorios de Nyiragongo, Rutchuru, Masisi y Walikale, ricos en minerales (oro, coltán, casiterita, cobalto), bajo la influencia económica, militar y política del régimen ruandés”.

Por eso, en las últimas semanas, el M23 ha ocupado más de 100 pueblos del territorio de Rutchuru; en muchos de ellos ha establecido una administración paralela a la del Estado, nombrando nuevas autoridades locales que le son leales e imponiendo impuestos ilegales.

Por último, las personas también son explotadas. Son los mineros, a menudo de entre 14 y 25 años, quienes realizan trabajos de alto riesgo en lugares peligrosos, en condiciones duras, arriesgando sus vidas por desprendimientos y enfermedades que podrían evitarse si dispusieran de formas mínimas de protección.

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