El titular de esa sede sería el pastor de una hipotética base lunar 'El obispo de la Luna': Orlando, la diócesis más grande... de la galaxia

Un nuevo principio... El mensaje de san Pablo VI en la Luna
Un nuevo principio... El mensaje de san Pablo VI en la Luna

Cuando en 1969 el hombre pisó por primera vez nuestro satélite, el Código de Derecho Canónico vigente era el de 1917, que establecía que "cualquier nuevo territorio por descubrir se asigna automáticamente a la diócesis del lugar de donde partió la expedición". Un texto que ya no está vigente en el código actual, pero que en ese momento era válido

El cabo Cañaveral, de donde partió la misión del Apollo XI, pertenecía a la diócesis de Orlando, que curiosamente (o tal vez no tanto), fue erigida solo un año antes, en 1968. De modo que, con la ley canónica en la mano, en el mismo momento en que Amstrong pisó la Luna, monseñor William Donald Borders, primer obispo de Orlando, también se convirtió en primer obispo de la Luna

'Un paso pequeño para el hombre, un gran paso para la Humanidad", fueron las primeras palabras de un ser humano en la Luna. Un satélite, el nuestro, que no cuenta, por el momento, con población estable, aunque hay planes para que en 2025 pueda plantearse la creación de la primera base lunar habitada. Lo que sí tiene es obispo. En concreto, el de Orlando.

Podría parecer -nunca mejor dicho- una historia de ciencia ficción, pero lo cierto es que, en puridad -y con la aquiescencia de la Santa Sede-, la Luna tiene un obispo. Tal y como relata Juan Antonio Pascual en Computer hoy, cuando en 1969 el hombre pisó por primera vez nuestro satélite, el Código de Derecho Canónico vigente era el de 1917, que establecía que "cualquier nuevo territorio por descubrir se asigna automáticamente a la diócesis del lugar de donde partió la expedición". Un texto que ya no está vigente en el código actual, pero que en ese momento era válido. ¿Qué pasará si alguna vez llegamos a Marte y nos establecemos? Esa es otra historia.

El Vaticano pendiente de la llegada del hombre a la luna
El Vaticano pendiente de la llegada del hombre a la luna

De hecho, el cabo Cañaveral, de donde partió la misión del Apollo XI, pertenecía a la diócesis de Orlando, que curiosamente (o tal vez no tanto), fue erigida solo un año antes, en 1968. De modo que, con la ley canónica en la mano, en el mismo momento en que Amstrong pisó la Luna, monseñor William Donald Borders, primer obispo de Orlando, también se convirtió en primer obispo de la Luna.

Sorpresa papal

Tras el alunizaje, Borders mantuvo una audiencia con el Papa Pablo VI, al que le comentó, medio en serio, medio en broma, que estaba ante el obispo con mayor territorio de la galaxia, con más de 38 millones de kilómetros cuadrados. Cuentan que Montini se quedó sorprendidísimo, hasta que le recordaron la norma del Derecho Canónico.

Por el momento, se trata de un cargo meramente honorífico, porque no hay nadie a quien evangelizar, ni sobre el que impartir doctrina en la Luna. Pero ojo: la NASA tiene planes para regresar a la Luna en 2025, y hay planes para establecer, en el futuro, una colonia habitable.  El obispo William Donald Borders, el primer Obispo de la Luna, reconocido por la Iglesia Católica, falleció en 2010. Así que esa tarea le correspondería al actual Obispo de Orlando, John Noonan.

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