Australia procesa a 23 periodistas por su cobertura del caso contra el cardenal Un asesino múltiple y dos terroristas, vecinos de Pell en la cárcel

El cardenal Pell, condenado a seis años de cárcel por pederastia
El cardenal Pell, condenado a seis años de cárcel por pederastia

El purpurado pasa 23 horas al día en aislamiento en su celda

Lo hace en compañía de James Gargasoulas, el "asesino de la calle Bourke", y los hermanos Ertunc y Samed Eriklioglu

Gargasoulas "habla por debajo de la puerta y joroba a la gente. Es un agitador... intenta enfadar a la gente", apunta una fuente de la Prisión de Evaluación de Melbourne

Un asesino múltiple que tormenta a los reos por las noches y dos hermanos terroristas. Son los vecinos inmediatos del cardenal pederasta George Pell en la Prisión de Evaluación de Melbourne, según ha apuntado una fuente penitenciaria al periódico local el Herald Sun.

Tal y como adelantó RD y confirma dicha fuente, Pell, condenado el diciembre pasado a seis años de cárcel por pederastia, pasa 23 horas al día en aislamiento en su celda, debido al riesgo de sufrir agresiones de otros prisioneros pero también por su delicado estado de salud. Lo hace en compañía, por un lado, de James Gargasoulas, hombre que atropelló en enero de 2017 a decenas de viandantes en la calle Bourke, en pleno centro de la ciudad de Melbourne, causando seis muertos.

"Gargasoulas es muy verboso, particularmente por las noches. Habla por debajo de la puerta y joroba a la gente. Es un agitador... intenta enfadar a la gente", afirmó la fuente del Herald Sun.

Otros vecinos de Pell en su bloque de aislamiento son los hermanos Ertunc y Samed Eriklioglu, acusados junto con un cómplice de querer perpetrar un ataque terrorista masivo en Melbourne, en la planificación del cual fueron arrestados cuando intentaron comprar un rifle semiautomático en el mercado negro. 

Según apunta la fuente del sistema penitenciario, Pell pasa este infierno con malas compañías a la espera de que sea trasladado a una cárcel más amena a su edad y condición física. Quizás el Centro de Correcciones del pueblo de Ararat, a unos 200 kilómetros al oeste de Melbourne, que alberga a prisioneros especialmente vulnerables a represalias policías corruptos y que ofrece un programa no obligatorio para delincuentes sexuales, y como tal abierto a Pell.

El todavía cardenal "es un viejo con muchos problemas de salud", recordó la fuente. "Tiene problemas serios de corazón y movilidad... Debe estar en un ambiente mejor de modo que si se deteriora su salud, puede ser trasladado a un hospital".

Pell apelará el próximo 5 y 6 de junio su pena de seis años de cárcel e inscripción en el registro de delincuentes sexuales de por vida por la violación oral y abuso de dos menores de 13 años, crimen que el juez calificó de "asombrosamente arrogante".

George Pell: el cardenal condenado por pederastia
George Pell: el cardenal condenado por pederastia

Australia procesa a 23 periodistas por su cobertura del caso contra el cardenal

Mientras tanto, la Fiscalía australiana demandó a 13 grupos mediáticos y 23 periodistas por presuntamente contravenir las restricciones legales que impedían divulgar detalles referidos al proceso por pederastia contra Pell.

La demanda por desacato afecta a grupos como The HeraldWeekly Times o News Life a los que se acusa de "perjudicar o interferir con la debida administración de justicia" con sus informaciones, indicó en un comunicado el tribunal Supremo del estado de Victoria.

Los imputados se enfrentan a penas de prisión y multas de ser hallados culpables de violar las órdenes impuestas por el juez Peter Kidd, que prohibió divulgar pruebas relativas al caso de pederastia contra Pell y el veredicto del primer juicio contra el ex número 3 del Vaticano.

Varios medios internacionales divulgaron el veredicto del primer proceso, pero los medios locales debieron guardar silencio.

Entonces, el jurado que declaró culpable a Pell de cinco delitos de pederastia, uno de ellos por penetración oral, perpetrados contra dos niños del coro de la catedral de St Patrick, en Melbourne, en la década de 1990.

Los medios australianos tuvieron que someterse al apagón informativo debido a las restricciones del juez Kidd, orden que supuestamente habría sido violada por los demandados que deberán comparecer ante el tribunal el 15 de abril.

El sobreseimiento el 26 de febrero pasado del segundo proceso contra Pell, por delitos de abusos sexuales a menores presuntamente ocurridos en la década de 1970, llevó a Kidd a levantar las restricciones y permitió a la prensa australiana informar del caso que llevó al prelado de 77 años a ser condenado a seis años de prisión. 

La prensa, clave en el caso Pell
La prensa, clave en el caso Pell

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