Entrevista a Maider Fdz. Iriarte directora y coprotagonista Dios, Jordi y Maider. Encuentros basados en la ternura y la confianza.

Dios, Jordi y Maider. Encuentros basados en la ternura y la confianza.
Dios, Jordi y Maider. Encuentros basados en la ternura y la confianza. Las Letras de Jordi

Jordi cree en Dios y Maider cree a Jordi. El encuentro de Dios y Maider a través de Jordi.

Maider Fernández 2

Quién le iba a decir a Maider Fernández, una joven donostiarra, que la película “Las letras de Jordi”, su “ópera prima”, que nació como proyecto de fin de máster en la Universidad Pompeu Fabra de Barcelona acabara compitiendo en festivales internacionales como el de San Sebastián y que este viernes 13 de marzo, y a pesar de las limitaciones que está imponiendo el coronavirus,  se estrene en varias salas de cine.

Ella además figura como co-protagonista. Pero el personaje principal es Jordi.  Jordi tiene 51 años y dificultades motrices y expresivas debido a la parálisis cerebral. La película transcurre en torno a varios encuentros, entrevistas en las que ambos se comunican con la ayuda de una tabla formada por las letras del alfabeto.

¿Cómo surge este proyecto?

Yo había hecho un master de cine documental y tenías que presentar una propuesta como trabajo de curso. Yo pensé hacer algo sobre Lourdes, me puse en contacto con un grupo de peregrinos de Barcelona, y así fue como llegué a conocer a Jordi. Me llamó mucho la atención su persona y ahí mi proyecto dió un giro hasta convertirse en lo que hoy se presenta en las pantallas. 

Lo que se proyectará en la pantalla ¿es el material íntegro grabado o una selección?

Es  una selección. Una ardua selección. Al principio las grabaciones estaban pensadas como material de investigación, pero al final lo que cuenta es una historia del encuentro entre dos personas, una que tiene parálisis cerebral y es creyente y la otra que no tiene parálisis cerebral y no cree en Dios.  

¿Por qué el interés sobre temas que son duros para Jordi, como la vejez de sus padres? 

Con la evolución del trabajo yo descubro que quiero hacer un retrato completo de Jordi, y para ello necesito acercarme y comprender algunos temas de su vida. Ni la vida de Jordi ni la de sus padres ha sido fácil. Y yo quería que eso quedase reflejado. No fue fácil ni para mi preguntarlo ni  para él contestar, pero siempre hubo un pacto de parar cuando él dijese y de no contestar nada que no quisiera. El montaje de la película es un momento que te permite quitar escenas que puedan ser difíciles de ver, pero también incluirlas porque creas que van a ayudar a los demás a comprender lo que tú quieres trasladar, en este caso la verdad sobre la vida de Jordi.

¿El ritmo de la película quiere trasladar también al espectador el ritmo lento de la vida de Jordi?

Sí, totalmente. la escena cuando cuelga el teléfono tiene su tiempo real. Un gesto que para cualquiera es automático y rápido, a Jordi le lleva su tiempo. La cadena que precisa Jordi para una comunicación telefónica también aparece reflejada. Luego hubo un trabajo de edición que ha buscado compaginar ese ritmo lento pero no aburrido, se ha buscado también mantener la atención del espectador en todo momento. Para mi era fundamental respetar el ritmo de Jordi.

Hacia mitad de la película se desarrollan unas escenas acompañadas de música que sugieren como el preludio de un milagro, ¿qué es lo que pretendes realmente con esos recursos de imagen y sonido hacer llegar al espectador?

Jordi viaja a Lourdes para conectar con Dios. Por otro lado él no cree en los milagros. He intentado trasladar con esas escenas, el silencio de diálogos y la música, cómo Jordi se acerca  a ese escenario. En esa sucesión de escenas es donde se ponen en paralelo la experiencia de Bernardette y la de Jordi.

Es cierto que el modo de comunicación de Jordi ocupa gran parte de la película y de su vida, pero ¿por qué el título de “Las letras de Jordi”? 

Porque es la forma con la que él se comunica. 

¿Jordi es un elegido por Dios?

Yo le creo a Jordi.

¿Pero tú no eres creyente?

Yo no he tenido la suerte de sentir esas conexión. Pero si él la siente yo le creo. No soy quien para ponerla en duda. 

¿Qué sentimientos te inspira Jordi?

Me inspira ternura, confianza. Es una persona que he conocido y de la que me he hecho amiga.

¿Y qué sentimientos crees que le inspiras tú a Jordi? 

Creo que los mismos.

Me encanta la llamada telefónica entre vosotros, la naturalidad que emana la escena. ¿Cómo encaja esta escena en la película?

Pretende cerrar la historia. Al final lo que se cuenta es la historia de una persona que quiere grabar una película con otra persona. Pero eso es algo limitado, tiene un comienzo y un final. La llamada pretende ser el final, el adiós entre esas dos personas.

El final brutal y arriesgado, pero no hacemos spoiler. ¿Estaba programado?

Pues salió prácticamente sin querer. Quede con Jordi para hablar y me dijo que el fin de semana iba a hacer “algo” por primera vez en su vida. Y yo le dije, pues quiero grabarte haciendo ese “algo” por primera vez en tu vida. Ese “algo” además está relacionado con lo que Jordi sintió en Lourdes. ¡Y hasta ahí voy a contar!

¿Por algún motivo especial el trabajo se lo dedicas a tu abuela?

Ha sido, y es, una mujer especial en mi vida. 

¿Has pensado que tu encuentro con Jordi haya podido ser la forma elegida por Dios para encontrarse contigo?

(Se ríe)  Pues quizá. No sé si lo he llegado a pensar alguna vez. Lo que sí puedo decir es que ha sido una experiencia diferente a lo que vivo en mi cotidianidad. Me ha servido para conocer otras creencias. Yo no tengo claro en lo que creo.  

Non solum sed etiam

Quizá pueda sorprender que una mujer que se confiesa no creyente decida bucear en el mundo de lo religioso para hacer un trabajo audiovisual. A mi no me sorprende. No es el primer caso de un no creyente, que desde la sencillez, la honradez y el respeto se acerca para conocer de cerca el mundo de la fe, qué hay detrás de la fe de tantas personas que se confiesan creyentes. Así, y de una manera limpia y sin prejuicios, muchos acaban teniendo “experiencia de Dios”, o al menos llegan a pensar que quizá no sea tan descabellado que Dios existe. 

Otra propuesta fílmica para ver en los cines o en las plataformas televisivas cuando llegue a ellas.  Y no se pierdan el final, es brutal!!!!

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