Visita paso a paso.

Atraviesas la puerta del hall y das a la impresionante escalinata coronada por un Sagrado Corazón de Jesús que “recibe” a cuantos entran a este impresionante Seminario.

Pero la exposición llama pronto la atención y nuestra vista gira a la izquierda para encontrarse con: LA INJUSTICIA EN EL MUNDO.
Y así se explica por los responsables de esta singular muestra:
“Este cuestionamiento del sentido de la Justicia en el mundo nos pone frente a la actual crisis y sus consecuencias.
Las guerras programadas hasta el más mínimo detalle para expoliar las materias primas y consumir las armas para que los fabricantes puedan seguir haciendo un negocio que nunca acabe.
El monumento al soldadito heroico nos muestra la degeneración humana de una infancia y juventud forzada a matar, violar y ser violada para que los buitres sigan teniendo carnaza.
Los verdaderos responsables de este crimen de lesa humanidad están detrás: son los “buitres” del G-20 y sus amos, socios y colegas.
Necesitamos desenmascarar a los verdaderos causantes de la crisis: esos buitres (políticos, banqueros, financieros, fabricantes de armas y demás corporaciones multinacionales que especulan con el precio de los alimentos, la posesión de la tierra la destrucción del medio ambiente y el agotamiento de los recursos existentes) a los que se les cae la baba viendo la destrucción que han originado y el botín que esperan recoger.
A su lado los políticos obedientes a las instrucciones de “los mercados”. Y al otro lado los humanos, convertidos en víctimas, que forman una bomba de pobres que está a punto de explotar.
Detrás de los humanos dos armas poderosísimas que aniquilan y destrozan el sentido de Justicia y la vida de las personas: Los Paraísos Fiscales y las Operaciones de Rescate.
Si nos asomamos al rincón de la tortura, la infancia prisionizada, las penas infamantes y la pena de muerte nos daremos cuenta de la actualidad de tantas cosas que nos parecían cosas del pasado.
Pero si nos asomamos al otro rincón, al de los experimentos, nos daremos cuenta de cómo las personas humanas más normales podemos ser capaces de las atrocidades más inimaginables, sólo con que nos pongan en las situaciones propicias.
Si hubiéramos nacido en otro país, en otro ambiente, podríamos sentirnos orgullosos de haber matado a pedradas a muchas mujeres solo por ser adúlteras.
Síntesis:
Al final todo es cuestión de toma de conciencia y compromiso personal:¿Dónde se sitúa cada uno de nosotros ante las personas que son juzgadas? ¿De frente o a su espalda?”

El café tertulia del dia 2.

El reto de la cárcel, en materia de salud, son los trastornos mentales

En el café tertulia estuvieron Asier López de Arkaute, facultativo en la prisión de Zaballa, y Toño Errazti, médico de toxicomanías del centro penitenciario. Además de compartir cómo se materializa en la práctica la asistencia sanitaria a las personas que están en prisión, han contado que la gran mayoría de la población encarcelada es fundamentalmente una población enferma. En ese sentido los dos ponentes han incidido en que la cárcel es una fábrica que per se produce de modo intensivo enfermedad psíquica y física (desde alteraciones sensoriales –pérdida de visión, de audición, etcétera- hasta desequilibrios emocionales). Pero en su opinión lo realmente preocupante es la alta proporción de personas con trastorno mental que están recibiendo los sistemas penitenciarios. Según nos han explicado, este importante número de personas con trastorno mental es condenado a tener un tratamiento, muchas veces insuficiente e inapropiado, en instalaciones no concebidas para ello, con el consiguiente aumento de la cronicidad.

Como conclusión a su intervención, Asier y Toño, además de mostrar su deseo de que la entrada en prisión no anule nunca los derechos sanitarios de la población reclusa, también han manifestado que es urgente encontrar una vía alternativa a la situación presente, en la que las prisiones se convierten en el destino y recurso asistencial para personas con enfermedades mentales.

Non solum sed etiam.

Mirar de frente a la Verdad no es fácil, mirar de frente a cualquier imagen que te rebote una reflexión y más si esta apela a la conciencia, no es fácil.
Pero las posturas más habituales son o la de mirar a la espalada o la de “dar la espalda”.
Por eso no es de recibo cargar toda la responsabilidad en el sistema ni en los “hacedores directos” del sistema y de su aplicación. No podemos olvidar ni perder de vista que en parte a los “buitres” los alimentamos entre todos.

Mirar a “otro lado” tiene como consecuencias que se den circunstancias como las denunciadas en el café – tertulia: que las cárceles se tomen como el recurso asistencial para algunas personas con enfermedades mentales.
Otro tema que o lo vemos “por la espalda” o “de espaldas a él”, cuando no, ni lo vemos.