“La vida de la Iglesia desborda los muros de nuestras parroquias” Monseñor Elizalde: "Se retomará el culto con las debidas medidas dictadas por las autoridades sanitarias"

Monseñor Elizalde: “La vida de la Iglesia desborda los muros de nuestras parroquias”
Monseñor Elizalde: “La vida de la Iglesia desborda los muros de nuestras parroquias” Pablo GH

San Prudencio y Estíbaliz, las primeras fiestas patronales en Álava que se celebran en casa

"Nos ceñiremos escrupulosamente a las medidas de las autoridades sanitarias en esa fecha para el interior de los templos y para la calle"

"Nos vamos encontrar con un problema económico las empresas, las familias, y también dentro de las diócesis y las parroquias, por esta falta de ingresos en tanto tiempo. De ahí la llamada a la generosidad en los presbíteros, familias y comunidades. Y en ese contexto de necesidad, vuelvo a reiterar, la prioridad son los más pobres"

"El Comité Ejecutivo de la Conferencia Episcopal está en constante contacto con el Gobierno para que en la desescalada haya consenso respecto a las medidas que afectan al culto público y no ambigüedad como en el confinamiento"

Seguimos bajo el estado de alarma por la pandemia del COVID-19 y, siguiendo la recomendación de evitar las celebraciones con pueblo empiezan, tras la Semana Santa, las fiestas religiosas y civiles que tradicionalmente nos convocan cada año. En Vitoria la primera es San Prudencio. Con este motivo, hablamos con el obispo de Vitoria, Juan Carlos Elizalde.

San Prudencio 001 copia

¿Qué sensación tiene al verse en la obligación de celebrar una eucaristía, tradicionalmente abarrotada de fieles, acompañado solo de las personas imprescindibles para celebrar y retransmitir la celebración? 

La certeza de que la Iglesia es algo más de lo que vemos palpablemente. Hay una misteriosa comunión en la fe que nos une con un influjo multiplicador. La vida de la Iglesia desborda los muros de nuestras parroquias. En ningún momento la Iglesia ha estado cerrada sino más viva y creativa que nunca. 

¿La misa sólo se podrá seguir a través de los canales de la Diócesis? ¿Se ha ofrecido a medios de comunicación como la EITB o Radio Vitoria? ¿Han mostrado ellos interés por hacerlo como algún año?

Por ambas partes se ha intentado, también cada domingo y en el Triduo Pascual. Les interesa pero tienen problema de insuficiencia de personal laboral para cubrir tantas horas de audiencia. 

San Prudencio 002 copia

La homilía de este año será muy especial, diferente a otros años… 

Sí y no. Como siempre encomendaremos a San Prudencio y a la Virgen de Estíbaliz a nuestros difuntos, un recuerdo que sí está marcado por las circunstancias; pero también como siempre presentaremos al Príncipe de la Paz y a nuestra Madre a las autoridades públicas, que, si siempre han de afrontar una dura tarea de trabajar por el bien común, más especialmente en las actuales circunstancias. San Prudencio siempre ha sido una ocasión para llamar a la paz y a la solidaridad, en esta ocasión con mayor sentido si es posible. El papa Francisco nos decía en el segundo domingo de Pascua: "Pero esta pandemia nos recuerda que no hay diferencias ni fronteras entre los que sufren: todos somos frágiles, iguales y valiosos. Que lo que está pasando nos sacuda por dentro. Es tiempo de eliminar las desigualdades, de reparar la injusticia que mina de raíz la salud de toda la humanidad." Haré una llamada, que no es original, a no expulsar a Dios de la sociedad. El mensaje será muy similar a otros años, pero encarnado en el 28 de abril de 2020.

San Prudencio 003 copia

La siguiente gran celebración cristiana será el Corpus. ¿Han pensado en alguna alternativa, que respetando las normas de distanciamiento social, o incluso consultando con las autoridades, permita que el Santísimo recorra las calles de la ciudad? ¿Se podría hacer en un vehículo abierto?

Es el 14 de Junio. Nos ceñiremos escrupulosamente a las medidas de las autoridades sanitarias en esa fecha para el interior de los templos y para la calle. Como es un tema que afecta a todo el mundo, no faltarán las propuestas más variadas, así que elegiremos, como siempre, la de más sentido común y en comunión con las diócesis de nuestro país.

La falta de vacuna hace prever que las grandes concentraciones durante gran parte de este año queden suspendidas. Los San Fermines de su tierra ya lo han anunciado, y La Virgen Blanca tendrá que ir pensando en cómo celebrar sin fastos y sin fiestas. ¿Están trabajando ya desde el obispado y la Cofradía de la Virgen Blanca?

Se trasladen o no las fiestas, los actos litúrgicos vinculados al 5 de Agosto, como ocurrió con la Semana Santa, se celebrarán de acuerdo a las medidas sanitarias del momento. Las procesiones de Semana Santa se trasladaron pero el Triduo Pascual se celebró en su fecha. Quizás sea lo litúrgico lo único que se salve en su fecha, haya fiestas o no. Dentro de la Diócesis consensuaremos con tranquilidad Obispado, Parroquia de San Miguel y Cofradía de la Virgen Blanca. Y con las instituciones lo mismo, y sin ningún problema. 

Recientemente conocíamos la decisión del episcopado español de renunciar a una parte de su sueldo para destinarlo a paliar las consecuencias de la pandemia. Esto me sugiere preguntarle: La ausencia de fastos conlleva una ausencia de gastos, ¿se ha pensado en redireccionar de forma solidaria los gastos que este año no se harán?

Por supuesto. La prioridad de la Iglesia son las personas más vulnerables. Nos vamos encontrar con un problema económico las empresas, las familias, y también dentro de las diócesis y las parroquias, por esta falta de ingresos en tanto tiempo. De ahí la llamada a la generosidad en los presbíteros, familias y comunidades. Y en ese contexto de necesidad, vuelvo a reiterar, la prioridad son los más pobres.

San Prudencio 004 copia

La Diócesis de Vitoria fue la primera, llevada por la incidencia de los contagios en nuestra ciudad, a tomar medidas que iban más allá de las dictaminadas por el Gobierno. Fue la primera en dar un paso al frente y, la mayoría de las Diócesis fueron adoptando medidas similares, a medida que veían que los contagios se extendían por todo el territorio nacional. Pero, y es algo que a muchos ha descolocado, un reducido número de obispos no han seguido esas mismas pautas, creando una sensación de falta de unidad de criterios en la Iglesia. Lo hecho hecho está, ¿de cara a la “desescalada” se corregirán estas discrepancias?

El Comité Ejecutivo de la Conferencia Episcopal está en constante contacto con el Gobierno para que en la desescalada haya consenso respecto a las medidas que afectan al culto público y no ambigüedad como en el confinamiento. Ahora ya no se ańade el factor sorpresa. En ninguna diócesis se ha abolido el culto, sino el culto público. Y ahora se retomará con las debidas medidas dictadas por las autoridades sanitarias. 

Y para terminar. De una manera u otra seguro que muchas personas pretenden ayudarles o influir en su tarea de orientar a los fieles, también desde los medios de comunicación, internos y externos, y todos acabamos con una buena voluntad de ponernos a su servicio. Hoy, para usted, ¿cuál sería la actitud más acertada que responda a ese deseo sincero de “ponernos a su disposición” para caminar unidos como Pueblo de Dios?

Repescar las claves que ha ido soltando el Papa para esta nueva normalidad: rehuir la autosuficiencia y el orgullo, apostar por la solidaridad y la cultura del encuentro, conversión personal y pastoral, una vida familiar y eclesial más sencilla y austera, y una vuelta a las raíces de nuestros mayores y de nuestra vida. La línea 1 que estamos trabajando en el Plan Diocesano de Evangelización, la Diócesis, creadora de comunidad, puede recoger estas pistas.

Non solum sed etiam 

“En ningún momento la Iglesia ha estado cerrada sino más viva y creativa que nunca.” Me quedo con esta frase del obispo de Vitoria para mi particular “non solum”.  Me quedo con ella porque la comparto plenamente. La Iglesia siempre se ha crecido en las dificultades. Y, aunque haya voces, de fuera y de dentro (que a veces son las peores) que pretendan dar una imagen de, o bien una Iglesia cerrada en sus oraciones, y creo que hace mucho que no teníamos una Iglesia más ora et labora; o bien de timorata por no hacer frente a una persecución (¡Dios bendito, que se lean el informe bianual de Ayuda a la Iglesia Necesitada sobre libertad religiosa y quizá aprendan a distinguir qué es una verdadera persecución que hoy viven hermanos nuestros en Nigeria, por poner un ejemplo)  que nos deja (mentira) sin misas. Creo que puedo afirmar sin temor de estar exagerando que nunca, nunca la oferta de oraciones, rosarios, misas, ejercicios espirituales, … nunca había sido tan grande. Pronto escribiré sobre uno de los retiros más masivos que se han dado en España, este fin de semana, más de 5000 personas. ¡Ojo! y cada una desde su casa, como Dios manda.

San Prudencio 007 copia

Volver arriba