Repicar de campanas: Por las víctimas de Lorca, por todas!!!

Me lo pide el cuerpo. El trágico balance de víctimas en el terremoto de Lorca arroja la cifra de: según los medios de comunicación, 9 víctimas mortales, entre ellas un chaval y dos mujeres embarazadas.
Pues lo siento, “me faltan víctimas”, las que se encuentran en el vientre de esas madres.

¿Acaso los familiares de esas mujeres no llorarán también al hijo, nieto, al hermanito, al sobrino, al ahijado, que nunca llegarán a ver?

Claro que el recuerdo será más fácil y evidente por la víctima a la que se le pueda poner rostro. Pero las criaturas que venían “en camino”, también quizá tenían hasta nombre. Para el recuerdo de sus familiares no es preciso que ese nombre figure en el Registro Civil, es suficiente que esté registrado en su corazón.

Por respeto a las víctimas, a sus familiares y seres queridos, no, no deberíamos ignorarlos. Independientemente de que la ley los considere personas susceptibles de derechos civiles. Han de tener el derecho al reconocimiento del resto de los humanos.

Y si no, ¿a qué viene apostillar que eran dos mujeres embarazadas? ¿Por qué diferenciamos a estas dos mujeres del resto de mujeres fallecidas en el mismo hecho?
Pues porque en nuestro fuero interno cuando hablamos de mujer embarazada estamos hablando en plural. Ese término encierra a más de una persona.
No es el tema, pero … ¡Ya está bien que para justificar el aborto se ignore al ser concebido!
Volver arriba