Vitoria -diócesis y provincia- están religiosamente de enhorabuena Estíbaliz: 'Año Santo' (con miel, dulces e indulgencias)

Con las características propias de la docta, oportuna y documentada noticia, se distribuyó a su tiempo la información de que el único monasterio de clausura de hombres, que registraba la Iglesia en la ciudad, provincia y diócesis de Vitoria, habría de cerrar indefinidamente sus puertas.

Para calibrar la importancia del tema, con su proyección cívica, social, histórica y, por supuesto, religiosa, es preciso adelantar que el monasterio-santuario dedicado a Nuestra Señora de Estíbaliz es uno de los más importantes y significativos recintos sagrados del País Vasco y del resto de España.

Los siguientes datos y reflexiones podrán contribuir a tomar conciencia de ello:

El santuario de la Virgen de Estíbaliz, a tan solo ocho kilómetros del centro de Vitoria, se ubica en el municipio de Argandona. Es obra del siglo XI, en la que destaca su puerta “Speciosa” – es decir, “preciosa”-, su pila bautismal y el frontal de piedra del altar del Cristo, con reminiscencias visigóticas. En pleno Camino de Santiago, en su versión primitiva, también reconocido por la Unesco como “Patrimonio de la Humanidad”, era y es lugar de excepcional relevancia humana y divina.

A los expertos en gramáticas vasca y latina, les dejamos libres en esta ocasión para defender la procedencia etimológica de “Estíbaliz”, de “estival”-estación del año entre la primavera y el otoño- , y mejor, del correspondiente étimo vasco con el significado de “miel”, con referencias sublimes y devotas al ministerio de la “dulzura, -apacible, bondadoso, placentero y agradable-, de cuyo tesoro inapreciable e inexhausto es, por definición, depositaria la Virgen María, Madre de Dios y nuestra, a la vez.

La Virgen María es de por sí, y con personalidad afectiva, “miel”, esto es “Estíbaliz”, en todas partes, pero un poco más para alaveses y alavesas, con inclusión de sus devotos y de quienes portan su nombre después de haber recorrido el Camino Jacobeo, desde los más lejanos países de Europa.

Y resulta que durante los últimos 99 años de haber sido atendido pastoralmente el santuario alavés por una Comunidad de frailes benedictinos, estos se han visto obligados a tener que abandonar sus dependencias, ministerio y atención prestada a los peregrinos y a los devotos en general. Un lugar sagrado más, entre tantos otros, a los que les llegó la hora de echarles el cierre, con cuantas consecuencias “divinas y humanas”, llevan consigo y comportan esta clase de cerrojazos.

¿Causas de este abandono?

Tal y como a su debido tiempo confesaron los máximo responsables de la Orden de San Benito,- nada menos que “Patrono de Europa”-, la causa no es otra que la falta de vocaciones que padece el clero en la actualidad, tanto el diocesano como el regular o religioso .(Al cerrar se le suele entregar de momento la llave a algún o alguna vecina cercana, hasta que lo permitan y se percaten de ello los “cacos” y los despojen de sus tesoros artísticos, con inclusión de las mismas campanas, que durante siglos guiaron los pasos de los peregrinos que perdían el Camino, o de cuantos devotos pretendían arrodillarse ante la sagrada imagen, tal y como lo habían hecho sus progenitores de generación en generación).

En el caso concreto de Estíbaliz, tan grave problema parece haberse afrontado y, por ahora, resuelto, sustituyendo a los frailes benedictinos una Comunidad de Hermas Peregrinas de la Eucaristía, fundación relativamente joven -sus fundadores, el Padre Francesco María y la Madre Amada Clara-, proceden de Colombia, quienes tienen ya tres casas en Navarra y otra en Madrid. La Fundación cuenta con una rama de religiosos y otra de religiosas además de los laicos.

Por lo que concretamente se refiere a Estíbaliz “su comunidad estará formada por quince monjas , todas muy jóvenes, con menos de treinta años de edad, lo que será un impulso y rejuvenecimiento para la diócesis de Vitoria”. Se puntualiza que “uno de los Peregrinos Eucarísticas será el capellán de ellas, a la vez que servirá a la parroquia de los Ángeles, cargo que hasta el presente atendían los Padres Dominicos, y que abandonan también a consecuencia de la falta de vocaciones en la Orden de Santo Domingo”.

Acerca de la razón de ser de la Fundación colombiana de “Los Peregrinos y Peregrinas de la Eucaristía” , se informa que “su misión es la de anunciar, iluminar e impregnar todos los aspectos de la existencia del ser humano con el bien supremo que nos comunica la existencia de Nuestro Señor Jesucristo, presente, vivo y real en el Sacramento de la Eucaristía, mediante renovadas formas de apostolado”.

Las Hermanas Peregrinas de la Eucaristía tomarán el relevo a los benedictinos en el Santuario de Estíbaliz https://t.co/MvoA2OaAtG

— Ángel Acuña Montenegro (@angelacunamont1) April 28, 2023

"Las religiosas han tenido a bien crear un dulce propio con el que conmemorar el Año Jubilar, en el que no faltará la miel que le confiere nombre al monasterio de Estíbaliz"

Vitoria -diócesis y provincia- están religiosamente de enhorabuena y más a lo largo y ancho del Año Jubilar concedido por el papa Francisco, con la concesión de las indulgencias debidas. Para que la satisfacción resulte más provechosa, las religiosas han tenido a bien crear un dulce propio con el que conmemorar el acontecimiento, en el que no faltará la miel que le confiere nombre al monasterio de Estíbaliz.

De entre tantas preguntas que salen al paso en el camino de esta información, destaco la de ¿qué pensará Isabel, la Reina Católica por antonomasia, con proceso de beatificación ya iniciado, al comprobar que los y las evangelizadas de sus “Indias”, habrían de ser evangelizadores/as, a consecuencia de la falta de vocaciones?

PEREGRINAS ESTÍBALIZ 🙏🏻 | La nueva comunidad de #Estíbaliz ha recibido la bienvenida de las principales instituciones del territorio. La Sailburu @nmelg y demás autoridades forales y municipales han saludado a la Superiora, Madre Amada Clara, en su primer día en el monasterio. pic.twitter.com/GhsDrSJVKT

— Diócesis de Vitoria - Gasteizko Elizbarrutia (@DiocesisVitoria) May 1, 2023

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