Diario de la 94 jornada de asedio ruso en Ucrania Shevchuk: "Da la impresión de que el diablo está utilizando todos los instrumentos militares posibles para matar la vida en Ucrania"

Sviatoslav Shevchuk
Sviatoslav Shevchuk

"Hoy quiero reflexionar con ustedes sobre otro pecado de aquellos que llamamos “pecados ajenos”. Pecado que podemos cometer al hacernos cómplices del pecado de nuestro prójimo. Seguimos meditando sobre la serie de los “pecados ajenos”. Entre ellos hay un pecado muy especial y especialmente peligroso hoy en día. Este pecado es “alabar al pecado”"

"Los crímenes que se están cometiendo en Ucrania merecen una condena unánime"

¡Cristo ha resucitado!
Queridos hermanos y hermanas en Cristo, hoy es sábado, 28 de mayo de 2022 y Urania vive ya 94 días de resistencia nacional defendiéndose de la abierta agresión rusa contra nuestro pueblo y contra nuestro Estado.

Damos las gracias a las Fuerzas Armadas de Ucrania por haber podido vivir una noche más y por haber podido dar la bienvenida a esta nueva mañana.

Durante este último día, esta noche que pasó, Ucrania volvió a sangrar. Tenemos combates durísimos especialmente en el Donbás donde el enemigo ha concentrado todas sus fuerzas. La guerra continúa por tierra, por cielo y por mar... Da la impresión de que el diablo está utilizando todos los instrumentos militares posibles para matar la vida en Ucrania, para asesinar... En la región de Luhansk se están librando duras batallas. Tuvimos un ataque muy violento en los alrededores de la ciudad de Severodonetsk, que logró sobrevivir una noche más a pesar de estar parcialmente sitiada. Hay ataques muy intensos en el sur de nuestra Patria. También se libran difíciles batallas, se produjo un potente ataque con misiles en la provincia de Zaporozhzhia y en Dnipropetrovsk.

Guerra
Guerra

Pero a pesar de estar viviendo momentos tan difíciles, Ucrania no pierde esperanza porque no dejamos de rezar. Porque creemos en la Resurrección. Realmente sentimos que sólo el poder de Dios y el apoyo internacional, mundial permitirán a Ucrania detener y derrotar eficazmente a nuestro enemigo.

Hoy quiero reflexionar con ustedes sobre otro pecado de aquellos que llamamos “pecados ajenos”. Pecado que podemos cometer al hacernos cómplices del pecado de nuestro prójimo. Seguimos meditando sobre la serie de los “pecados ajenos”. Entre ellos hay un pecado muy especial y especialmente peligroso hoy en día. Este pecado es “alabar al pecado”.

Cuando hablamos de alabanza, de modo particular cuando hablamos de alabar al pecado, estamos hablando de algo mucho más profundo y serio que expresar cierta simpatía o apoyo intelectual. “Alabar” en el sentido cristiano significa desear llegar a ser como aquel a quien se alaba y glorifica. Así es que los primeros cristianos estaban dispuestos a ir a la muerte antes que alabar a los ídolos. Estaban dispuestos a morir antes que a sacrificar incienso al emperador romano. En el libro del Apocalipsis, con el que concluyen las Sagradas Escrituras, vemos que el Anticristo exigirá alabanzas de la humanidad. Exigirá que sus acciones sean alabadas como los hombres alaban a Dios. Cada vez que alabamos los crímenes porque intentamos explicar a los demás que justamente era de este modo que era correcto actuar en esta situación determinada; cada vez que alabamos a los dictadores cuyas manos están manchadas de sangre humana; cada vez que alabamos el mal, nos convertimos en cómplices de ese mal a través de nuestra alabanza.

Dice el profeta Isaías: “Ay de los que llaman al mal bien, y al bien lo llaman mal” . Muy a menudo no somos conscientes, ni siquiera nos damos cuenta del peligro que corremos al alabar el mal y al pecado. Por eso los cristianos de todas las épocas y de todas las naciones dicen que “sólo a Dios toda alabanza, honor y adoración” .

Ucrania
Ucrania

Hoy, efectivamente, los crímenes que se están cometiendo en Ucrania merecen una condena unánime. Aquel quien hoy, ya sea a nivel internacional, o económico, o incluso eclesiástico; intente justificar, apoyar o alabar las acciones criminales rusas está desgraciadamente enfermo del peligro de hacerse responsable de la culpa de este mismo pecado sobre el que estamos reflexionando hoy.

Tengamos mucho cuidado con aquellos que hablemos, con lo que alabamos, con lo que exaltamos, con lo que pongamos como modelo digno de imitación. Porque con nuestras alabanzas multiplicamos los modelos de comportamiento criminal y pecaminoso.

Oh Señor, danos tu Espíritu Santo, que es el Espíritu de alabanza. Enséñanos a alabarte sólo a Ti. Enséñanos a los cristianos de la nueva era a proclamar que sólo a Dios le corresponde toda la gloria y el honor. Oh Dios, bendice a todos los que hacen el bien. Danos fuerza para alabar, para alabar a los héroes, a los héroes del amor a Dios y al prójimo de nuestro tiempo. Oh Dios, en tus manos confiamos las ciudades y pueblos del Donbás ucraniano. En tus manos confiamos la vida y la salud de los defensores de Ucrania. En tus manos confiamos la vida de todos aquellos que se encuentran en los territorios ocupados y que ya no tienen esperanza de recibir ayuda. Oh Dios bendice a Ucrania.

La bendición del Señor y su misericordia descienda sobre ustedes por su divina gracia y amor y permanezcan ahora y siempre y por los siglos de los siglos, amén.
¡Cristo ha resucitado! ¡Verdaderamente ha resucitado!

Te regalamos la Praedicate Evangelium + análisis
Volver arriba