Ante la 80ª edición de la Feria del Libro de Madrid El libro religioso, "en salida"

Feria del Libro de Madrid 2021
Feria del Libro de Madrid 2021

En medio de un mar de libros, entre la casetas de los otros editores, libreros, distribuidores y organismos oficiales de nuestro país, la Iglesia se hace presente tímidamente con su propuesta cultural, o, mejor dicho, contracultural

Una presencia que quiere incidir en el mundo de la cultura y de los libros. Una presencia evangelizadora pequeña pero significativa, reflejo de una Iglesia en salida que no deja de querer hacerse presente en esta periferia cultural tan especial

La lectura tiene la virtualidad de ser mediadora y vehículo de cultura. La feria nos ofrece quince días de cultura y libros. También de Evangelio, no lo olvidemos

Varias editoriales y librerías religiosas de nuestro país, haciendo un esfuerzo encomiable, presentan estos días sus novedades, autores y catálogos en las casetas de la Feria del Libro en el Retiro de Madrid. La feria alcanza su 80ª edición. Las noticias hablan con optimismo de lo que se espera de esta peculiar feria que, dadas las circunstancias socio-sanitarias, este año se decidió posponer al mes de septiembre. El buen tiempo que se espera y las cuidadas medidas anti COVID-19 harán que transitar entre las casetas resulte seguro, agradable y que la feria de este año -aunque se esperan muchísimos visitantes- no esté masificada.

Y ahí, en medio de un mar de libros, entre la casetas de los otros editores, libreros, distribuidores y organismos oficiales de nuestro país, la Iglesia se hace presente tímidamente con su propuesta cultural, o, mejor dicho, contracultural. Una presencia que quiere incidir en el mundo de la cultura y de los libros. Una presencia evangelizadora pequeña pero significativa, reflejo de una Iglesia en salida que no deja de querer hacerse presente en esta periferia cultural tan especial.

Entre los presentes hay varios editores de libro religioso con su caseta propia. Otras editoriales católicas están también presentes a través de las de librerías, como la de las Hermanas Paulinas que nuevamente acude puntual a la cita con sus propios libros y amables sonrisas, haciendo llegar también a los visitantes libros buenos de otras editoriales católicas más modestas.

Convencidos de ser colaboradores en la misión de hacer llegar a nuestra sociedad el mensaje de Cristo, los editores, libreros y demás agentes que intervienen en esta industria editorial, nos sentimos Iglesia en salida, en diálogo con la cultura actual, ofreciendo libros buenos que la enriquezcan, la contrasten y la fecunden evangélicamente. No es tarea nada fácil, pero ahí estamos, humildemente, sin hacer demasiado ruido. Nada que ver con el eco mediático que suscitan otros asuntos de Iglesia poco edificantes, que en ocasiones se tornan en carnaza morbosa, emponzoñándolo todo, llenando demasiado espacio —¡y tiempo!— y no aportando prácticamente nada.

La lectura tiene la virtualidad de ser mediadora y vehículo de cultura. La feria nos ofrece quince días de cultura y libros. También de Evangelio, no lo olvidemos. Aquello de san Pablo de que “la fe viene por el oído”, podría ser actualizado a un “la fe viene (también) por la lectura”. No desaprovechemos la ocasión —¡hay incluso un descuento especial!— para adquirir un buen libro religioso para nosotros o para regalárselo a alguien al que le pueda hacer bien Decían los clásicos que no hay libro malo que no tenga algo bueno. En este caso, les garantizo que ningún libro religioso tiene nada malo que ofrecer, sino todo lo contrario. Eso sí, quizá la lectura de estos libros buenos nos haga pensar, nos eleve el espíritu, nos haga salir de nuestras zonas de confort o nos invite a replantear algunas cosas en nuestras vidas. Es lo que tiene Jesús y su Evangelio: que a nadie deja indiferente.

Primero, Religión Digital
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