El Gobierno trabaja en una proposición que castigaría estas prácticas con hasta dos años de cárcel Los evangélicos creen que considerar delito las terapias de conversión "sería una clara violación de la libertad religiosa"

Solicita formalmente que se retire o se revise el texto de la proposición de ley para evitar la "ambigüedad" y excluir expresamente las "prácticas religiosas no coercitivas"
"Compartimos la condena a toda práctica coercitiva o degradante, pero consideramos inaceptable que se confunda ese tipo de intervenciones con formas libres de acompañamiento espiritual", ha señalado la secretaria ejecutiva y representante legal de FEREDE, Carolina Bueno
| RD/Ep
La Federación de Entidades Religiosas Evangélicas de España (FEREDE) ha enviado una carta a la directora general de Libertad Religiosa, Mercedes Murillo, en la que expresa su "profunda preocupación" por la proposición de ley que busca modificar el Código Penal para castigar con hasta dos años de cárcel las denominadas 'terapias de conversión' y solicita formalmente que se retire o se revise el texto para evitar la "ambigüedad" y excluir expresamente las "prácticas religiosas no coercitivas".
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FEREDE alerta que, en su forma actual, la propuesta "podría criminalizar actividades religiosas legítimas" como la oración, el acompañamiento espiritual o el asesoramiento pastoral ofrecido de manera voluntaria.

"Compartimos la condena a toda práctica coercitiva o degradante, pero consideramos inaceptable que se confunda ese tipo de intervenciones con formas libres de acompañamiento espiritual", ha señalado la secretaria ejecutiva y representante legal de FEREDE, Carolina Bueno.
La federación, que representa a más de 3.500 iglesias evangélicas en España, denuncia la "ambigüedad" del término "terapia de conversión" en la propuesta y dice que "podría abrir la puerta a sanciones contra personas que simplemente prestan alguna ayuda o apoyo a quienes desean vivir conforme a su fe".
Incluir "actos de cualquier naturaleza", según FEREDE, refleja una "falta de rigor jurídico" que puede dar lugar a "interpretaciones abusivas".
FEREDE asegura que en sus iglesias "no se practican terapias destinadas a cambiar la orientación sexual de las personas", pero defiende el derecho de toda persona a recibir acompañamiento espiritual voluntario, de acuerdo con su fe
FEREDE asegura que en sus iglesias "no se practican terapias destinadas a cambiar la orientación sexual de las personas", pero defiende el derecho de toda persona a recibir acompañamiento espiritual voluntario, de acuerdo con su fe.
"Penalizar estas prácticas sería una clara violación de la libertad religiosa. En una sociedad libre y plural, los ciudadanos tienen derecho a solicitar apoyo espiritual conforme a sus creencias, siempre que no medie coacción ni daño", se afirma en la carta.

Desde una perspectiva jurídica, FEREDE recuerda que el artículo 16 de la Constitución Española protege la libertad religiosa como un derecho fundamental que incluye tanto la dimensión individual como colectiva, y que la doctrina del Tribunal Constitucional ha subrayado el derecho de las personas a actuar conforme al credo que profesan.
En este sentido, la federación argumenta que "recibir acompañamiento para alinear la conducta personal con las propias convicciones religiosas es parte del libre desarrollo de la personalidad y no debe ser objeto de sanción penal".
En su misiva, FEREDE anuncia que trabajará activamente para evitar que la propuesta legislativa salga adelante y, en caso de que se mantenga, exigirá que el texto sea redactado "con el máximo rigor legal, de manera que se limite exclusivamente a conductas que impliquen tortura o daño físico o psicológico, y que no se criminalicen expresiones legítimas de fe ni el acompañamiento espiritual voluntario".
FEREDE también pide que se garantice el respeto al derecho de los padres a educar a sus hijos conforme a sus convicciones y que se consulte sobre estos asuntos a las confesiones religiosas y a la Comisión Asesora de Libertad Religiosa, conforme al principio de cooperación reconocido en la Ley Orgánica de Libertad Religiosa.
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