El rey de Arabia Saudí, Abdalá bin Abdelaziz, propuso hoy la creación de un centro de diálogo entre las ramas del islam cuyo objetivo sea unir la voz de los musulmanes, en la inauguración de la cumbre de la Organización de la Cooperación Islámica (OCI) en La Meca.
Abdelaziz hizo la propuesta en presencia de jefes de Estado de países suníes y chiíes como el presidente de Irán, Mahmud Ahmadineyad, con el que Arabia Saudí mantiene desde hace años una tensa relación agravada ahora por los conflictos en Siria o Baréin.
"La 'umma' (nación) musulmana vive hoy una situación de discordia y división, y por esa causa se derrama la sangre de sus hijos en este mes sagrado de Ramadán en varios lugares del mundo islámico", dijo Abdelaziz.
Por ello, consideró que la solución debe ser la solidaridad, la tolerancia y la unidad, "ante todo lo que puede perjudicar a nuestra religión y a nuestra unión".
"Propongo la creación de un centro de diálogo entre las ramas islámicas para llegar a una palabra unida", dijo el monarca, quien agregó que sus miembros serán propuestos por la Secretaría General y el Consejo Ministerial de la OCI y elegidos en una cumbre islámica.
Como sede de ese centro de diálogo, Abdelaziz sugirió la capital saudí, Riad.
La OCI celebra entre hoy y mañana su cumbre de jefes de Estado, donde está previsto que se estudie la posibilidad de suspender la participación de Siria en la organización.
Esta medida es, sin embargo, rechazada por Irán, uno de los principales aliados del régimen sirio de Bachar al Asad, cuyos firmes detractores en esta cita son Catar y Arabia Saudí. (RD/EFE)
