Comunión de vida

Comunión de vida

Una luz clara como el día

nos anunció un recién nacido, una esperanza.

Mientras, hambriento de presagios,

sereno en la espera,

me comprometí a buscar tu Rostro.

Benditos por el anhelo y la angustia de los pobres,

urgidos por su día a día,

despojados de sandalias, ofertas, báculos,

riquezas y poder

y confiando solo en ti…

Aconsejados por los desheredados,

entrañados por la misericordia,

silenciados únicamente por la no-vida,

crucificados por el odio,

pacificados por la verdad,

no por la connivencia.

Celebrar, festejar, gozar,

cuando otros beban el vino

de nuestra alegría

y el amor sea el alimento imprescindible,

partido y compartido,

común-unión de nuestras vidas.

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