Su íntimo despertar

Su íntimo despertar
Su íntimo despertar

Ya no pudo respondernos.

Y no regresó.

Su mirada se había quedado atrapada,

ausente y absorta,

en un horizonte imaginario,

en un pasado oculto,

en un abrazo perdido.

Y allí permaneció inexpugnable

hasta que consiguió elevar

el último vuelo,

cuando le sedujeron

las olas durante el sueño:

fue su íntimo despertar.

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