Urgencias en nuestro momento actual.

Después las elecciones andaluzas, donde tantas personas católicas han votado y después de escuchar lgunas afirmaciones de algunos de nuestros obispos como el de Córdoba me atrevo a sugerirle a él y a todas las personas que nos consideramos católicas que lean con detenimiento estas propuestas que el Papa Francisco ofrece como CLAVES DE DISCERNIMIENTO.

Entiendo que son claves de discernimiento para la vida, para cuando vamos a votar, para cuando defendemos unas políticas u otras, para cuando consideramos que algo es evangélico o no…¿Cuántas personas las tenemos en cuenta en estos momentos?

Ante los desafíos del mundo actual El Papa Francisco en la Evangelii Gaudium nos marca un claro camino ofreciéndonos como él dice unas líneas de discernimiento en el capítulo II donde desarrolla lo que él llama: “En la crisis del compromiso comunitario” [52-60]

[52] En este número nos advierte de un dato muy grave: Cada vez más personas viven en precariedad existencial, una situación que provoca miedo, desesperación, crece la inseguridad y la violencia…todo ello lleva a muchas personas a vivir una vida donde falta el respeto a la dignidad. Esta situación nos pide decir:
• No a una economía de exclusión y de inequidad (nº.53-54).

[53] Esta economía mata (es asesina). Una economía basada en el juego de la competitividad y la ley del más fuerte. Es ser humano se convierte en un bien de consumo que puede usar y tirar. Eso genera una cultura del descarte que provoca una exclusión que afecta en su raíz la pertenencia a la sociedad. Los excluidos no es que sean explotados sino que son desechos sobrantes.

[54] Esta situación da lugar a la globalización de la indiferencia, ya no se nos conmueven las entrañas, el cuidado ha dejado de ser una responsabilidad, parece que esto ya no nos incumbe. La cultura del bienestar nos anestesia
• No a la nueva idolatría del dinero ((55-56) [55]Vamos aceptando pacíficamente el predominio del dinero sobre nosotros y nuestras sociedades. Esto está generando una profunda crisis antropológica: la negación de la primacía de las personas en aras de la adoración del dios dinero. La dictadura de la economía reduce al ser humano a ser un consumidor.

[56] Las diferencias y la desigualdad económica es cada día mayor. Esta situación está situación está sostenida por las ideologías que defienden la autonomía absoluta de los mercados y de la especulación financiera. Se niega a los Estados el derecho de control para velar por el bien común. La deuda y sus intereses impiden a los países hacer viables sus economías. Además la corrupción generalizada, la evasión fiscal se mundializan.
El afán de poder y de tener no tiene límite. Todo (personas, medio ambiente, vida del planeta) queda fagotizado por el afán de obtener beneficios. El mercado queda divinizado.

• No a un dinero que gobierna en lugar de servir(57-58) [57] Detrás de esta situación está el rechazo a la ética y a Dios porque ambas realidades relativizan el dinero y el poder. Hoy más que nunca urge una reforma financiera que no ignore la ética.
[58]El dinero debe servir no gobernar. Urge una economía y una cultura a favor de la vida.

• No a la iniquidad que genera violencia y descarte de personas(59-60)
[59] Mientras no se revierta la exclusión y la inequidad será imposible erradicar la violencia. Mientras se siga excluyendo a gran parte de la población se producirá una inevitable explosión social porque este sistema es injusto en su raíz. La inequidad instaurada en las estructuras genera violencia y muerte. [60] El consumo desenfrenado unido a la inequidad genera una violencia que los armas no resolverán jamás. La represión violenta no sólo no resuelve sino que crea más conflictos y cada vez más graves. Tampoco es solución una educación que intente tranquilizar y domesticar. El cáncer social de la corrupción de gobiernos, empresas, instituciones sólo provoca cada vez más irritación y violencia.

OJALÁ SEAN ESTAS LAS PRIORIDADES Y URGENCIAS DE NUESTROS OBISPOS, DE NUESTROS SACERDOTES, RELIGIOSAS Y RELIGIOSAS, DE TODAS LAS PERSONAS QUE NOS CONSIDERAMOS CATÓLICAS. SÍ ASÍ FUERA TENDRÍAMOS OTRO MUNDO, OTRA SOCIEDAD, OTRAS OPCIONES POLÍTICAS, OTROS RESULTADOS EN LA VOTACIONES.
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