Bendice, ¡oh alma mía!, a tu Dios. Puntos de meditación. 14-11-
21
«Bendice, ¡oh alma mía!, a tu Dios porque su bondad me ha sacado de la nada y su misericordia me ha creado.
Hazle ofrenda. ¡Oh Dios mío!, te ofrezco el ser que me has dado, con todo mi corazón; te lo dedico y te lo consagro.
Seas para siempre bendito, Creador y Salvador nuestro,
Porque eres tan bueno y porque nos comunicas tan generosamente tu gloria.
La meditación produce celo, imitación de la vida de Nuestro Señor, compasión. La meditación produce admiración, gozo, temor de no ser grato a Dios
La meditación produce confianza en la bondad y misericordia de Dios,
La meditación produce confusión por nuestra mala vida pasada.
Varias meditaciones con ideas de la Introducción a la Vida devota. De San Francisco de Sales
José María Lorenzo Amelibia
Si quieres escribirme hazlo a: josemarilorenzo092@gmail.com
Mi blog: https://www.religiondigital.org/secularizados-_mistica_y_obispos/
Puedes solicitar mi amistad en Facebook https://www.facebook.com/josemari.lorenzoamelibia.3 Mi cuenta en Twitter: @JosemariLorenz2