Pecados mortales inútiles

            Me tocó estudiar toda la Teología moral en latín. Y lo entendía bien; no me resultó enojoso. Pero había cuestiones que me llamaban la atención sobremanera. Nuestro libro de texto era Noldin; gozaba de gran fama en los años cincuenta. Recuerdo que describía cómo habíamos de celebrar la santa Misa. Y todo lo medía con la regleta del pecado. Llegamos a contar hasta diez pecados mortales que podíamos cometer mientras celebrábamos el Santo Sacrificio: uno de ellos, si dejábamos de echar la gota de agua al cáliz en el momento del ofertorio; otro, si colocábamos el copón, con las hostias para ser consagradas, fuera de los corporales y del ara; y así hasta ocho o diez; no recuerdo todos los detalles ahora.

              Comentábamos entonces los compañeros lo tremendo que era celebrar Misa. Había que tener mucho cuidado para no caer en tanto pecado mortal. Se nos hacia muy raro, pero callábamos. Y los pecados veniales, muchos más...

             Yo sé que, por ejemplo, echar la gotita de agua es muy importante porque Jesús la mezcló con el vino en la Última Cena; pero de ahí a decir que bajo pecado mortal.... ¿No sería mejor esto?: procurar no olvidar bajo ningún concepto estas ceremonias importantes...  ¿Es que podemos imaginar que nadie vaya a celebrar la Eucaristía en broma o en plan sacrílego, de mala fe? ¿A qué viene conminar bajo pecado ciertas ceremonias? Hoy nadie hablaría de esto, y no pasa nada. Algo peor hacen muchos curas con esas misas para niños que son un juego infantil ridículo. Y ni a estos curas absurdos los conminan bajo pecado. Pero esto ya es otra cuestión.

             Vamos a reflexionar en la barbaridad que hacían estos moralistas antiguos. Entonces había muchos curas escrupulosos, tomaban tan en serio esto del pecado mortal en las ceremonias, que para evitarlos caían en crisis nerviosas obsesivas de todos conocidas en aquellos años.

             ¡Y pensar que la Iglesia es madre de salvación, y nos la presentaban aquellos moralistas de una forma tan poco amorosa y tan cruel!  Creo que algo hemos avanzado; pero si escribo esto no es “a humo de pajas”, sino porque existe hoy una corriente en algunos sectores cristianos que añora ciertas teorías antiguas, procedentes tal vez de los cátaros o jansenistas.

             Todos los pecados van más allá de lo inútil. El pecado mortal es el peor de los males que existen. Siempre hemos de partir de este principio.  Pero ahora me refiero a esta serie de pecados mortales que nos decían antiguos moralistas que podemos cometer al recibir o celebrar los sacramentos. ¿Y si realmente cayeron en estas faltas mortales algunas personas? No quiero ni pensarlo.

            Pero que no volvamos a cometer estas aberraciones que nada dicen a favor de la Iglesia madre de salvación. Corrección en todo, sí, pero sin conminar bajo pecado mortal, me parece que no procede. 

José María Lorenzo Amelibia                                         Si quieres escribirme hazlo a: josemarilorenzo092@gmail.com              Mi blog: https://www.religiondigital.org/secularizados-_mistica_y_obispos/  Puedes solicitar mi amistad en Facebook https://www.facebook.com/josemari.lorenzoamelibia.3                                          Mi cuenta en Twitter: @JosemariLorenz2