Campaña de las instituciones jesuitas por el Día de las Personas Refugiadas #Sumomicamino: comparte 'Caminos de Hospitalidad' para millones de pies "que no pueden dejar de caminar"

Las ONG jesuitas buscan 'Caminos de Hospitalidad' para las personas refugiadas
Las ONG jesuitas buscan 'Caminos de Hospitalidad' para las personas refugiadas @SergiCamara

Bajo el lema #SumoMiCamino, las organizaciones del Sector Social de la Compañía de Jesús en España (Red Mimbre, Servicio Jesuita a Migrantes, Alboan y Entreculturas) lanzan la iniciativa Caminos de Hospitalidad

“El sistema de acogida español es muy imperfecto”, lamentó Luis Arancibia, quien insistió en que, pese a todo, “la gente, la vida, lucha por hacerse camino”

79,5 millones (alrededor del 1% de la población mundial) son personas que se han visto forzadas a abandonar su país; la mayoría (el 73%) trasladándose a países vecinos al de origen. Muchos de ellos mujeres y niños

Miles de zapatos, con suelas gastadas por millones de pies, millones de pasos, infinitos peligros, mafias, violaciones… Unas huellas que se pierden, en la mayor parte de las ocasiones, en el mar, en cualquier de las fronteras, en el olvido de los medios de comunicación.

#Sumomicamino es una invitación a caminar esos pasos. Porque “sólo desde ahí seremos capaces de encontrar respuestas”, según explicó Luis Arancibia, delegado del Sector Social de la Compañía de Jesús, durante la presentación de la campaña “Caminos de hospitalidad”, que se presentó esta mañana coincidiendo con la celebración, este domingo, del Día de las Personas Refugiadas.

Cientos de personas saldrán este mes a caminar para mostrar que queremos ser una sociedad de acogida, inclusión y solidaridad con las personas refugiadas. “Son muchas las personas que no pueden dejar de caminar”, reza el vídeo de la campaña, que muestra imágenes de migrantes y desplazados en Moria, Siria, el Mediterráneo, pero también en Canarias, Ceuta y Melilla. Una lucha por la vida, con diferentes caminos.

“Nuestra sociedad está basada en la cultura de la acogida, de la protección de toda vida en peligro”, destacó Arancibia, quien instó a “tomar conciencia, reconocer y actuar en favor de esta cultura de la hospitalidad”.

“El sistema de acogida español es muy imperfecto”, lamentó el experto, quien insistió en que, pese a todo, “la gente, la vida, lucha por hacerse camino”.

280,6 millones de personas viven en países distintos al suyo

Por su parte, Pablo Funes, coordinador del Área de Cooperación Internacional de Entreculturas (que, con Alboan, son los ‘brazos’ de la cooperación de los jesuitas en el mundo) resaltó cómo el 3,5% de la población mundial 280,6 millones de personas (con datos de mediados de 2020, en plena pandemia), viven en camino.

De ellos, 79,5 millones (alrededor del 1% de la población mundial) son personas que se han visto forzadas a abandonar su país; la mayoría (el 73%) trasladándose a países vecinos al de origen. Muchos de ellos mujeres y niños. ¿Por qué? Las causas que provocan la huida de las personas desplazadas forzosamente, los obstáculos que se encuentran en el tránsito y las condiciones a las que se enfrentan en el país de destino sitúan a las personas refugiadas y migrantes en situaciones de desprotección, discriminación y de vulneración constante de sus derechos. 

Asilo, refugio y persecución

Durante la rueda de prensa se han podido escuchar testimonios como los de Abir Ahmad Sabra, profesora de inglés en el centro educativo de Servicio Jesuita a Refugiados Nicolas Kluiters, Líbano, quien ha hablado de la importancia de la educación para los menores refugiados y de la “enorme responsabilidad que tenemos acompañando a las personas refugiadas en su camino, su camino es nuestro camino”. En esta línea, Sineyi Zambrano, solicitante de asilo en España ha relatado su camino de refugio desde que salió de Venezuela en 2018 hasta el día de hoy y cómo de importante están siendo para ella los pisos de acogida del Servicio Jesuita a Migrantes.

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Cinco brechas, diez medidas

Esta situación “nos llama a tratar de cubrir cinco brechas: la brecha del viaje ante la ausencia de vías seguras y legales; la de las fronteras, donde se deben respetar los derechos humanos; la de la inclusión para evitar desprotección e irregularidad; la de construir tejidos sociocomunitarios; y la brecha de convivencia para construir nuevos discursos, valores y modos de convivencia que nos permitan caminar en la construcción de una familia humana y una nueva sociedad” según declaró Jaime Pons, Coordinador del Área de Hospitalidad en el Servicio Jesuita a Migrantes. Fene a los discursos de odio, acogida y hospitalidad.

Además, se han presentado diez medidas necesarias que hay que poner en marcha para garantizar los Derechos Humanos y la inclusión de las personas desplazadas forzosamente. 

Todas las personas que quieran sumarse a esta iniciativa “podrán hacerlo a través de diferentes iniciativas que encontrarán en la web de Caminos de Hospitalidad o a través de #SumoMiCamino” concluía Dani Martínez, Coordinador de la Campaña Hospitalidad.

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