Mensajeros de la Paz, Ecovidrio y Paco Arango inauguran dos iniciativas en la catedral Dos años después de su muerte, el padre Ángel hace que el 'sueño de Justo' siga vivo en Mejorada

El padre Ángel, en la catedral de Justo
El padre Ángel, en la catedral de Justo

Junto al templo original, a la entrada, un espacio interreligioso, donde podrán rezar -separados, pero unidos- judíos, musulmanes o evangélicos. Después de 60 años de construcción, la catedral (que se hizo famosa gracias al anuncio de Aquarius, hace ya años) vive una segunda juventud, con las obras a buen ritmo, esperando poder ser inauguradas muy pronto

Dos iniciativas clave para el futuro del templo: el banco réplica "Jesús Desamparado" donado por Paco Arango y el proyecto #ElSueñoDeJusto de vidrio reciclado, donado por Ecovidrio, para las vidrieras de la Catedral de Justo, una construcción emblemática erigida con materiales reciclados

"Justo Gallego y su catedral son un ejemplo a seguir para todos los que también tenemos un sueño y, en el caso de Ecovidrio, nuestro sueño es aumentar la tasa de reciclaje en nuestro país, de manera que podamos contribuir al desarrollo sostenible de una sociedad y un modelo productivo basados en la economía circular a través del reciclaje de envases de vidrio", señaló Borja Martiarena

El sueño de Justo está más vivo que nunca. Y Mensajeros de la Paz, y el padre Ángel, se están encargando de ello. Este mediodía, coincidiendo con el segundo aniversario de su fallecimiento, la catedral de Justo Gallego vivió un emotivo evento, un paso más en la construcción de este templo de material reciclado, una auténtica 'catedral Laudato Si': la inauguración del banco de 'Jesús Desamparado', réplica del que se encuentra en la plaza de San Pedro.

Una imagen, cuyo original fue diseñado por Timothy Schmalzy, y que donada al Centro Social Catedral Justo por Paco Arango, estrecho colaborador de Mensajeros de la Paz y amigo personal del Padre Ángel.

La 'mezquita' en la catedral de Justo
La 'mezquita' en la catedral de Justo

Junto al templo original, a la entrada, un espacio interreligioso, donde podrán rezar -separados, pero unidos- judíos, musulmanes o evangélicos. Después de 60 años de construcción, la catedral (que se hizo famosa gracias al anuncio de Aquarius, hace ya años) vive una segunda juventud, con las obras a buen ritmo, esperando poder ser inauguradas muy pronto.

Iniciativas para construir un mundo mejor 

El Padre Ángel, fundador de Mensajeros de la Paz, destacó la importancia de la solidaridad y el impacto positivo de estas contribuciones en la comunidad: "Estas iniciativas ayudan a construir un mundo mejor. Este banco precioso representa a todas las personas que pasan hambre y están solas. Su presencia en este Centro Social Catedral Justo es un recordatorio constante de nuestra responsabilidad hacia los demás".

"Hoy se cumplen dos años de la muerte de Justo, y 29 de la del cardenal Tarancón. Debemos seguir soñando", explicó el sacerdote. "Entrar en esta realidad es ver cómo se realizan los sueños. Justo empezó en 1961, el mismo año en que iniciábamos los trabajos de la Cruz de los Ángeles. Era estar con un santo en vida", recordó el presidente de Mensajeros de la Paz.

Además, Ecovidrio presentó su proyecto en el cual donará vidrio reciclado por los ciudadanos en los contenedores verdes para completar las vidrieras de la Catedral de Justo. Esta iniciativa busca fusionar la preservación del arte con la conciencia medioambiental.

La catedral de Justo
La catedral de Justo

Vidrios reciclados para las vidrieras

Borja Martiarena, director de marketing de Ecovidrio, enfatizó en la importancia de la sostenibilidad y la colaboración para construir un futuro más responsable: "Justo Gallego y su catedral son un ejemplo a seguir para todos los que también tenemos un sueño y, en el caso de Ecovidrio, nuestro sueño es aumentar la tasa de reciclaje en nuestro país, de manera que podamos contribuir al desarrollo sostenible de una sociedad y un modelo productivo basados en la economía circular a través del reciclaje de envases de vidrio. Estamos muy orgullosos de poder aportar nuestro granito de arena al sueño de un auténtico pionero del reciclaje, llevando a cabo la donación de vidrio reciclado por los ciudadanos a través del contenedor verde. También queremos agradecer a la ONG Mensajeros de la Paz y al Padre Ángel que continúe con el increíble legado de Justo y que haya contado con nosotros para estar hoy aquí”.

Este evento demuestra el poder de la colaboración entre sectores para promover cambios significativos, tanto en el ámbito social como ambiental. 

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