El abad de Guadalupe y su bonanza inmobiliaria




Schulenburg: bonanza mobiliaria inexplicable

Judith García / El Sol de México. 11 de marzo. (Segunda de tres partes).- La riqueza acumulada por el exabad de la Basílica de Guadalupe Guillermo Schulenburg Prado, a lo largo de sus años de servicio religioso, consiste en cuantiosas sumas depositadas en cuentas nacionales y del extranjero, así como en valiosas propiedades inmobiliarias, ubicadas en zonas privilegiadas de la capital de la República y de la ciudad de Cuernavaca, Morelos, con un valor superior a los cuatro millones de dólares, cuya adquisición no puede explicarse considerando sólo los ingresos normales que corresponden a un ministro de la Iglesia.

w La bonanza inmobiliaria visible

Guillermo Schulenburg Prado, exabad de la Basílica de Guadalupe acumulo valiosos bienes inmuebles, cuatro de los cuales se identifican plenamente en los legados que instituyó dentro de su testamento a favor de sus familiares y de la Asociación Civil "Domus Spei", y que tienen un valor superior a los cuatro millones de dólares.

Son cuatro inmuebles: una residencia de lujo, un edificio y un despacho con accesorias, en zonas privilegiadas del Distrito Federal, y otra espléndida residencia y una acción en el exclusivo club de golf "Tabachines", en la ciudad de Cuernavaca, Morelos.

De todos estos inmuebles, Organización Editorial Mexicana tomó fotografías, que se publican dentro de esta misma edición, para ilustrar la magnitud de la bonanza inmobiliaria que Schulenburg acumuló durante sus años de servicio religioso.

* EL POTENCIAL INMOBILIARIO NO APARENTE

Además de los legados, Schulenburg instituyó como única y universal heredera "de todos sus demás bienes presentes y futuros", y también de albacea, a su hermana, la señora Isabel Schulenburg Prado de Carranza, lo que deja abierta la posibilidad de que existan más bienes inmuebles dentro de su patrimonio, pero que no fueron identificados con precisión dentro de su disposición testamentaria.

Dispuso también que en el caso de falta de su hermana Isabel Schulenburg Prado de Carranza, por muerte o por cualquier otra causa, quedaría en calidad de única y universal heredera "de todos sus demás bienes presentes y futuros" la Asociación Civil "Domus Spei".

* LOS LEGADOS DE LOS INMUEBLES

Mediante su testamento el exabad Schulenburg Prado legó a la Asociación Civil "Domus Spei" la casa de 940 metros cuadrados, en Bosque de Chihuahua número 40, Fraccionamiento Bosques de las Lomas, delegación Miguel Hidalgo, en el Distrito Federal. En la fachada de esta casa se encuentra un aviso de venta, y piden por ella un millón 295 mil dólares.

A su hermana Isabel Schulenburg Prado de Carranza le legó la casa en Avenida Tabachines número 75, en Cuernavaca, Morelos, edificada sobre un terreno de 1404 metros cuadrados, con 712 metros cuadrados construidos, jardín, estudio, alberca y garajes para seis vehículos, también con un aviso de venta, a la que le han fijado un precio de 7 millones 567 mil 772 pesos.

En caso de muerte de su hermana Isabel, -precisa el testamento- este inmueble pasaría a manos de sus sobrinas del testador Isabel Carranza Schulenburg de Cortés y Alejandra Carranza Schulenburg de España, a partes iguales.

Dentro del legado antes mencionado, se incluye una acción en el exclusivo Club de Golf "Tabachines" en Cuernavaca, Morelos, que cuenta con todos los adelantos y comodidades como alberca, restaurante, campo de golf, canchas deportivas, etc., fue legada a los mismos legatarios para que pueda ser utilizada o vendida a su elección.

Legó el despacho 401 y sus anexos, del edificio en condominio ubicado en la calle Río Tíber 99, colonia Juárez, en el Distrito Federal, a la Asociación Civil "Domus Spei". De acuerdo con empresas inmobiliarias, estos despachos miden 122 metros cuadrados y su valor en el mercado inmobiliario es de un millón 700 mil pesos.

Finalmente, el usufructo vitalicio del edificio ubicado en Tlacoquemecatl número 139, colonia del Valle, en el Distrito Federal, fue legado a sus hermanas Emilia Schulenburg Prado de Ochoa e Isabel Schulenburg Prado de Carranza, y la nuda propiedad a la Asociación Civil "Domus Spei". Este inmueble consta de cinco pisos, además de accesorias en la planta baja, del cual no se pudo tener acceso a su interior, pero su valor estimado es superior a dos millones de dólares.

* LA EXPLICACIÓN DE LA CEM

"Antes de cambiar las relaciones Iglesia-Estado, todo se hacía así: 'a la buena de Dios', con buena voluntad, y el párroco era el dueño de lo que entraba en su templo en limosnas y bienes, y ahí se acomodaba, y ahora no".

Prueba de ello, dijo el vocero de la CEM, el padre Manuel Corral, es que no se va a permitir que ningún sacerdote o jerarca católico se quede con dinero o propiedades, pues "los recursos son cada vez menos y los tienen que racionalizar, los tienen que priorizar. Ahorita la Iglesia no es como antes y también ha entendido que tiene que dar cuentas".

Además, destacó, ahora los mil 500 templos tienen que rendir cuentas dos veces al año. "Están en un plan muy severo y es lo que debe ser, porque al fin y al cabo somos administradores y no dueños de los dineros que los feligreses dan."

* INGRESOS SIN CONTROL, EXPERTO

En este contexto, Elio Mastefer, presidente de la Asociación de Estudios Religiosos, sostiene que desde El Vaticano no vendrán las líneas ni el control de todo lo que entra a la Iglesia, pues sólo les interesa recibir el diezmo de lo que reciban las iglesias del mundo, por lo que se permite a la jerarquía católica movimientos discrecionales en el manejo de recursos o bienes.
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