Roma investiga una supuesta trama de espionaje que se descubrió de manera casi fortuita, en mitad de unas informaciones sobre el ministro de Defensa de Meloni, Guido Crosetto, quien habría sido investigado de manera ilegal. La investigación descubrió que un teniente de la Guardia Financiera italiana habría filtrado a la información bases de datos de lavado de dinero y crimen organizado

Tirando del hilo, se hallaron informaciones relativas a algunos de los acusados por el 'caso Becciu', como Raffaelle Mincione (uno de los responsables de la compraventa fraudulenta del palacio de Londres), Gianluigi Torzi (el broker de Becciu) o Cecilia Marogna, quien creó junto al cardenal defenestrado por Francisco una diplomacia paralela, y que también fue condenada en el macrojuicio vaticano

El purpurado defenestrado por el Papa está acusado de cohecho, fraude agravado, abuso agravado del cargo y peculado

En total, son diez los imputados. Además de Becciu, Mincione, Enrico Craso, Torzi o Cecilia Marogna

Shina recorrió las etapas de las negociaciones en noviembre-diciembre de 2018, cuando la Secretaría de Estado, propietaria de facto del inmueble de Sloane Avenue con 30 mil acciones sin derecho a voto, quiso salir del fondo Gutt de Torzi para recuperar el control total del edificio, que Torzi, en cambio, retuvo con las ya tristemente célebres "mil acciones con derecho a voto"

"Aunque no tuviéramos derecho a voto, la Secretaría de Estado era la propietaria a todos los efectos. Ventilar un cambio significaba precisamente eso"

El Papa recibió al cardenal juzgado por presuntas irregularidades financieras a días de que se reinicie el proceso que investiga un posible fraude contra la Santa Sede por más de 200 millones de euros

Los hechos, por el momento, marcan que Francisco recibió hoy en el Vaticano al cardenal italiano Angelo Becciu, juzgado desde 2021 por presuntas irregularidades financieras con costos millonarios para la Santa Sede por las que le fueron sacados sus derechos cardenalicios en septiembre de 2020

Becciu se convirtió en el primer cardenal de la historia en ser juzgado por la justicia vaticana, que investiga en particular su actuación como "número 3" de la Santa Sede, entre 2011 y 2018

Este año, después de que en 2022 se conociera que grabó una charla telefónica con el Papa sin consentimiento, Becciu reveló un intercambio con el pontífice de agosto, después de que Chaoqui participara al "bacciamano" de la Audiencia General