La Misión en la vida consagrada 254 aniversario del nacimiento de la fundadora de las Mercedarias del santísimo Sacramento.

María del Refugio Aguilar y Torres

He tenido la dicha de compartir con las Hermanas Mercedarias del santísimo Sacramento muchos momentos de reflexión y de celebración, no solo en España sino en América. En México donde nacieron de la fuerza de la espiritualidad y caridad  de una mujer viuda, María del refugio Aguilar y Torres, y en San Antonio-Texas.

Os confieso que más de una  vez he quedado asombrado de la fuerza de la encarnación del carisma mercedario allí donde ellas viven, oran  adoran y trabajan. Una anécdota que nunca olvidaré será la que me ocurrió en Texas cuando conocí a una monja de etnia apache, con sus rasgos característicos, sister Teresa. Esta hermana se pasaba largas horas de oración ante la Eucaristía porque su carisma es eucarístico-redentor. Y después de la adoración, la hermana Teresa cogía su guitarra y se iba a las manifestaciones para defender la dignidad y exigir el respeto a los derechos de las mujeres mexicanas en tierras de EEUU, marginadas por ser mujeres y por ser mexicanas ilegales, en muchos casos. Allí en primera fila de la manifestación ella cantaba y gritaba exigiendo derechos y dignidad para las mujeres.

“Llevamos este tesoro en recipientes de barro para que aparezca que una fuerza tan extraordinaria es de Dios y no de nosotros” (2 Cor. 4, 7)

“La iglesia existe para evangelizar, esto es, para llevar la Buena Nueva a todos los ambientes de la humanidad y con su influjo, transformar desde dentro, renovar a la misma humanidad” (Directorio General para la catequesis 46)

  La misión se lleva a cabo en el hacer presente de Cristo en el mundo mediante el testimonio personal. ¡Éste es el reto, éste es el quehacer principal de la vida consagrada! Cuanto más se deja conformar a Cristo, más lo hace presente y operante en el mundo por la salvación de los hombres.

  Se puede decir, por tanto, que la persona consagrada está en misión en virtud de su misma consagración, manifestada según el proyecto del propio Instituto. Es obvio que, cuando el carisma fundacional contempla actividades pastorales, el testimonio de vida y las obras de apostolado y promoción humana son igualmente necesarias.: ambas representan a Cristo, que es al mismo tiempo el consagrado a la gloria del Padre y el enviado al mundo para la salvación de los hermanos.

  La vida religiosa, además, participa en la misión de Cristo con otro elemento particular y propio; la vida fraterna en comunidad para la misión. “La vida religiosa será, pues, tanto más apostólica, cuanto más íntima sea la entrega al Señor Jesús, más fraterna a vida comunitaria y más ardiente el compromiso en la misión específica del Instituto” (VC 72)

 Constituciones de las Mercedarias del Santísimo Sacramento138. (Capítulo 4)

  “La misión apostólica forma parte de la naturaleza de nuestro Instituto. Por tanto la vida de cada uno de sus miembros debe estar llena de espíritu apostólico  y toda la acción debe estar impregnada de espíritu religioso.

  Toda actividad apostólica ha de brotar siempre de la unión íntima con Dios  y a la vez conformarla y fomentarla. Esta misión la realizamos en nombre de la iglesia y por su mandato, y debe ejercerse en comunión con ella y a su servicio.

  1. Las hermanas Mercedarias del Santísimo Sacramento somos conscientes de un mundo encadenado por las esclavitudes actuales, al cual redimimos por medio de nuestra misión apostólica realizada en el mismo amor de Cristo en la Eucaristía.

 139.1  Las H.M.S C. Queremos testimoniar ante el mundo con nuestras obras apostólicas, nuestra caridad y acción redentora, mediante una conversión y renovación constante, evangelizando con María a la luz de la Eucaristía.

 Sirvan estas palabras de homenaje a las hermanas en este día tan significativo para la congregación y para toda la Orden de la Merced, a punto de celebrar su gran fiesta: la Virgen de la Merced, signo de unión de todas las ramas mercedarias de esta gran familia religiosa con más de 800 años de presencia en la iglesia.

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