Baltasar...,

...quiero contarte algo que sé entenderás. Al igual que tú y que Melchor y Gaspar, yo también ya tengo muchos años. Pero como en varios años anteriores, tú eres el que me ha dejado regalos, pues con confianza te escribo.

¿Sabes?, cuidar la parte de mi ser niña que tengo, es muy laborioso, pues muchos creen que si ya eres adulta y como yo en la vejez, ya no tenemos ilusiones por desear y menos por compartir.

Conservar conscientemente la belleza del ser niña en mi interior, es como una luz que resplandece y que hay que cuidar para que no se apague, aún cuando a veces sea muy difícil.  Quiero seguir creyendo en ustedes y especialmente en mí misma, también, contagiar o dar al que lo quiera o necesite este signo de alegría, ya sea porque lo desconoce o se siente tan abrumado por algún problema que esté viviendo.

Por eso, este año te pido algo muy especial, quiero un baúl inagotable de sonrisas, esperanzas y buena voluntad para hacer lo que me corresponde por mí y por los otros. Quiero compartirlo con todos los Karim que me rodean, conmigo porque he estado un tanto triste en estos últimos días, y con cada uno que me visite aquí en mi casa digital. Quiero que se sientan acogidos y bien venidos. También deseo infinidad de palabras de aliento, para los que están tan cansados por tantos problemas en su vida, que les cueste creer en ustedes, y menos en que siguen poseyendo esa parte de su ser niño, que todos conservamos en la vida.