EPIFANÍA ’24.-  Mt 2,1-12

“…en el tiempo en que Herodes era rey del país…

Vimos su estrella en el oriente y hemos venido a adorarle

El rey Herodes se inquietó mucho… Id allá y averiguad cuanto podáis acerca de ese niño; y cuando lo encontréis, avisadme, para que yo también vaya a adorarlo.-

Al ver la estrella, los sabios se llenaron de alegría. Luego entraron en la casa y vieron al niño con María, su madre. Y arrodillándose, lo adoraron. Abrieron sus cofres y le ofrecieron oro, incienso y mirra. Después, advertidos en sueños de que no volvieran a donde estaba Herodes, regresaron a su tierra por otro camino.”

Buscadores de la LUZ encuentran el CAMINO en el CIELO, arriba…  y CAMINAN en un momento determinado de la historia, cuando Herodes era rey…

Herodes se inquietó con la noticia de otro que atestiguan es el REY… entonces con miedo de perder su poder, comienza a mandar con mentiras.

Los caminantes siguen su CAMINO, VEN, OYEN y se ALEGRAN…  

Encuentran señales en el CIELO, pero también en la tierra y en el subconsciente, porque en SUEÑOS encuentran la LUZ para seguir el CAMINO… pero no el camino que les mandó Herodes, que se creía autoridad para torcer los caminos de DIOS.

El Dios que buscan no se revela sólo arriba, en el cielo, está recostado en un pesebre, rodeado de pobre gente y animales. Lo confirman otras señales que no son luminosas, más bien oscuras, la de un gobernante sediento de poder que se cree todopoderoso y que manda desde este lugar oscuro de su codicia y artimañas. Otra señal llega de las sombras de lo inconsciente: el sueño que les confirma que hay que desobedecer a Herodes. Un Dios diferente al que habían seguido hasta el momento. Este Dios habla también en escenas de la tierra, oscuras circunstancias políticas de la época …. Un Dios hecho historia.  

Ellos eligieron a este Dios del CAMINO que ALEGRAN, que VEN, OYEN, SIENTEN, SUEÑAN y SABEN por su experiencia que es CAMINO de Dios.