Testigo primera de la resurrección,
fiel apóstol.
Mostraste tu amor yendo el día primero
y tu corazón lloró más al no verle.
Te consternas.
¿Dónde le han puesto? ¿Quién se lo ha llevado?
Tu amor se ha quedado en un plano de muerte.
No le reconoces.
-El dolor no nos deja reconocer la esperanzay
lo confundes con el hortelano.
Dice tu nombre:
María
Testigo primera de la resurrección
tu nombre en sus labios renovó el amor
que trascendió al plano de la vida.