#adviento2023 El día más esperado (Parte IV)

El día más esperado (Parte IV)
El día más esperado (Parte IV)

Gracias Dios por tus bendiciones, hoy logré más movimiento en la rodilla y esto te lo debo a ti. Por mi parte, seguiré con más fortaleza, por mí y por mis hijos, poco a poco voy votando mis miedos, dame fuerza para seguir siendo la misma mujer y madre orgullosa de lo que he logrado, de mis hijos y dame la fortaleza para levantarme de nuevo.

He leído que: “Adviento, nos recuerda que tenemos la fe puesta en un Dios que se encarna para mostrar las bondades de lo humano; por tanto, hemos de estar atentos a sus manifestaciones cotidianas de amor y compasión entrañables.” Entonces, me tomo el atrevimiento de decir que durante estos meses que llevo luchando con mi rodilla, con las citas, la atención, el transporte, lo que tengo y lo que no, han sido un momento de Adviento, pues en cada persona, en cada día que amanece, he podido descubrir la presencia cercana de Dios.

Por eso le agradezco a Dios, que conoce cada rinconcito de mi cuerpo y de mi alma, estoy muy feliz por todas las oportunidades que me das para descubrir tu presencia en mis hijos, en mi familia, en lo que vivo día a día. Siempre con la fe puesta en ti papito Dios, en mi mamita María y en los angelitos, especialmente a ti mamá, mi angelita preferida, tú siempre has estado ahí, pendiente, pero tienes que estar tranquila, descansando en paz porque yo voy a estar bien con tus nietos y tu hijo.

Hoy es un día maravilloso como todos los días, Gracias Dios por estar junto a mis hijos y mi familia. Hoy está cumpliendo mi hijo 18 bellos años de vida y salud. Te agradezco por cuidarlo, por demostrarnos que tú eres el dueño de la vida, pues recuerdo cuando era pequeño y sufría de asma, verlo así me dolía mucho, pero ahora me llenas de alegría, te pido que lo sigas cuidando y a mí, me concedas la gracia de sanarme de mi rodilla, te cuento que ya he podido hacer varios movimientos.

Entonces, puedo decir que el día más esperado ha llegado, gracias Dios, por mi vida, por mi proceso, por ayudarme a flexionar mi rodilla. Hoy, después de cinco meses y medio fui a la cocina para organizar un poco y también estuve en la manga, recibiendo el sol tan hermoso, que solo tú nos regalas, tantas maravillas para disfrutar la vida.

Solo tu Dios amado, pudiste ser tan grande, tan bondadoso para acompañarme en mi proceso, para seguir dando lo mejor de mí, haciendo juiciosa mi terapia y agradeciéndote, porque al fin llegó EL DÍA MÁS ESPERADO, que no es solo el día en que pude levantarme y caminar de nuevo, sino TU VENIDA A ESTE MUNDO, es el día esperado por todos los que anhelamos un mundo mejor, que solo tú nos puedes enseñar a construir.

Que las esperas cotidianas, nos sirvan para aprender a descubrirte y conservar la esperanza de que vendrás. Gracias mi amado Dios por restar aquí en un hermoso bebé que nos llena de alegría y esperanza.

Volver arriba