Recibe a la Oficina de Correos y del Servicio Telefónico del Vaticano Francisco: "Gracias por difundir el mensaje cristiano"

La Posta Vaticana
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Los papas, desde siempre, han otorgado gran importancia a la comunicación con los jefes de Estado, las comunidades y los fieles individuales de las diferentes naciones, haciendo uso de los medios ofrecidos por la técnica 

Francisco agradeció a los empleados de la Oficina de Correos y del Servicio Telefónico del Vaticano por favorecer la difusión del mensaje cristiano y por hacer posible el intercambio comunicativo del Estado de la Ciudad del Vaticano con el mundo. 

El pontífice destacó que la actividad que llevan a cabo “supera con creces el pequeño territorio y la pequeña población que reside en él”. 

Francisco se reunió con los directivos y empleados del Servicio Telefónico y de Correos del Vaticano en la Sala Clementina para expresarles que su trabajo diario, aunque parezca humilde, “es más necesario que nunca para el correcto funcionamiento del Estado de la Ciudad del Vaticano”. 

“La Oficina de Correos y del Servicio Telefónico del Vaticano garantizan el intercambio de sentimientos e ideas, contribuyen a promover el entendimiento mutuo y la colaboración entre países de diferentes continentes, facilitando los intercambios, especialmente de sus respectivos valores espirituales y culturales”

, expresó ante más de 200 empleados. 

Asimismo, sostuvo que a pesar de ser servicios de uno de los países más pequeños del mundo, favorecen enormemente “a la difusión del mensaje cristiano”. 

Muchas personas 'alcanzan' al Papa

“A través de su precioso trabajo, cada día numerosas personas ‘alcanzan’ al Papa y él, a través de sus colaboradores, ‘alcanza’ a muchas personas”, afirmó, y subrayó que este intercambio comunicativo “responde a la necesidad innata de los individuos para crear contactos humanos” pero sobre todo “entra en todos los hogares al servicio de ricos y pobres”. 

En este sentido, el Papa recordó una antigua inscripción latina grabada en un buzón del Estado Pontificio en la que se leía: "Diviti et inopi, ultro citroque, meandum", que significa: "Debe llegar a ricos y pobres, de todo el mundo". 

Por último, Francisco señaló que los papas, desde siempre, han otorgado gran importancia a la comunicación con los jefes de Estado, las comunidades y los fieles individuales de las diferentes naciones, haciendo uso de los medios ofrecidos por la técnica y explica que en las últimas décadas, tanto los Hijos de la Divina Providencia (Orioninos) como la Sociedad de San Paolo (Paulinos) han colaborado en este sector tan importante y concluye agradeciéndoles “por su generosidad y fidelidad”.

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