Exclusiva RD El papa Francisco propone a sus bases que voten una nueva bandera del Vaticano
La nueva enseña entra en vigor el 1 de enero de 2024 y en Pontífice argentino quiere que los fieles elijan entre dos opciones que han sido supervisadas personalmente por él, según ha podido confirmar Religión Digital
Ateniéndose a su "suprema autoridad", Francisco ha elegido el lado amarillo de la actual bandera, el lado que está a la izquierda, para añadir un nuevo símbolo que represente su pontificado y así este pueda permanecer en la historia
La primera propuesta está en sintonía con una de las líneas más reconocidas del mandato bergogliano: dos manos abiertas sosteniendo un corazón multicolor que recuerda a la imagen gráfica del colectivo LGTBIQ+. En la segunda opción, un balón de fútbol se eleva al cielo como puente entre creyentes y no creyentes
La primera propuesta está en sintonía con una de las líneas más reconocidas del mandato bergogliano: dos manos abiertas sosteniendo un corazón multicolor que recuerda a la imagen gráfica del colectivo LGTBIQ+. En la segunda opción, un balón de fútbol se eleva al cielo como puente entre creyentes y no creyentes
| RD
La Ciudad del Vaticano, el Estado soberano más pequeño del mundo en extensión y población, establecerá una nueva bandera el 1 de enero de 2024, y con ese motivo, someterá a sus bases a una votación para que elijan su nueva enseña entre dos opciones, supervisadas personalmente por el papa Francisco, según ha podido confirmar en exclusiva Religión Digital.
La actual bandera de la Ciudad del Vaticano está formada por dos franjas verticales con los colores amarillo y blanco. El blanco simboliza el cielo y la Gracia de Cristo y en esta zona están dibujadas las llaves del Reino de los Cielos. El otro lado, el amarillo, representa a las llaves de oro, símbolo de San Pedro y de la suprema autoridad del Santo Padre.
Precisamente, ateniéndose a esta "suprema autoridad", Francisco ha elegido el lado amarillo, que además está a la izquierda, para añadir un nuevo símbolo que represente su pontificado y así este pueda permanecer en la historia. Aquí es donde están las dos opciones que las bases deben votar.
El corazón multicolor
La primera opción está en sintonía con la reciente e histórica declaración del Dicasterio para la Doctrina de la Fe por la cual la Iglesia puede bendecir a las parejas de homosexuales o parejas en situación irregular (es decir, divorciados vueltos a casar, es decir, adúlteros) y, en general, con una de las líneas más reconocidas del mandato bergogliano.
El símbolo propuesto son dos manos abiertas sosteniendo un corazón multicolor que recuerda a la imagen gráfica del reivindicativo colectivo LGTBIQ+, tan apreciado por el papa Francisco ya al comienzo de su papado ("Si una persona es gay y busca a Dios y tiene buena voluntad, ¿quién soy yo para juzgarlo?").
Esta primera propuesta para la nueva bandera del Vaticano contaría con la aprobación, según fuentes consultadas por RD, del Episcopado alemán, de los obispos argentinos (aunque se habría cuidado mucho de dar pistas de ello durante su encuentro con el presidente Javier Milei), las madres sinodales, los religiosos y sacerdotes que no usan hábito y la productora de Jordi Évole.
El balón de fútbol
En la segunda opción, un balón de fútbol se eleva al cielo. Según los expertos, se trata de representar lo humano y lo divino en una sola imagen: un elemento terrenal pero venerado en todo el planeta (el balón de fútbol) entra en diálogo con la trascendencia más absoluta.
El Papa, gran aficionado a este deporte, ha elegido este objeto convencido de su capacidad para tender puentes entre creyentes y no creyentes.
El añadido de la bandera argentina es un guiño evidente al origen del Pontífice, pero no solo: la selección de Argentina, actual campeona del mundo liderada por Lionel Messi, es una de las escasas instituciones que goza del consenso internacional por su buen juego y por la moderación de sus aficionados. Incluso se habla de que Francisco apoyaría la candidatura del equipo para el Premio Princesa de Asturias de la Concordia, si bien este punto no ha podido ser confirmado.
A favor de esta versión de la bandera estarían de nuevo la productora de Jordi Évole ("Es que me gusta todo lo que hace", señaló el catalán en un reciente corrillo con periodistas), el CELAM y la CLAR, el Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral, el Comité Olímpico Internacional y varias federaciones deportivas internacionales, casi todas las televisiones de Oriente Medio y Asia y, en definitiva, todos los tuiteros que alguna vez hayan escrito "Gracias, Francisco" sin pedir a continuación su conversión.
La posición del Episcopado español
Los obispos españoles no se han inclinado de momento por ninguna de las dos propuestas, y ni siquiera está claro si harán alguna valoración del hecho de que el Vaticano modifique la enseña del Estado.
"Es algo que viene de Roma", ha señalado de manera completamente ambigua un miembro de la CEE que ha preferido mantener el anonimato.
Votación a mano alzada
La votación tendrá lugar el próximo 31 de diciembre durante la celebración de las primeras Vísperas y Te Deum de acción de gracias que Francisco presidirá en la Basílica de San Pedro. Los asistentes votarán a mano alzada, guiados por el espíritu sinodal que se está propagando en la Iglesia y que, según algunos observadores, terminará destruyéndola.
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N. de la R.: Confiamos en que el lector no coincida con esta opinión. Desde RD seguimos apoyando la sinodalidad, la primavera del papa Francisco y el buen humor como necesaria píldora oxigenante de vez en cuando. Y por si es necesario, aclaramos a quien haya llegado hasta aquí que esta noticia es inventada: una inocentada habitual en la prensa española hoy 28 de diciembre, que esperamos le haya servido al menos para sonreír.
