"El corazón de la Iglesia está desgarrado por los gritos que se elevan desde los lugares en guerra" León XIV clama contra la guerra con palabras de Francisco: "¡La guerra es siempre una derrota!"
El corazón de la Iglesia está desgarrado por los gritos que se elevan desde los lugares en guerra, en particular desde Ucrania, Irán, Israel y Gaza
En realidad, ya que en la guerra actual se utiliza armas científicas de todo tipo, su atrocidad amenaza a conducir a los luchadores a una barbarie de gran profundidad superior a la de los tiempos pasados
En nombre de la dignidad humana y del derecho internacional, repito a los responsables lo que solía decir el Papa Francisco: La guerra es siempre una derrota. Y con Pablo VI, "nada es perdido con la paz. Todo puede serlo con la guerra"
En nombre de la dignidad humana y del derecho internacional, repito a los responsables lo que solía decir el Papa Francisco: La guerra es siempre una derrota. Y con Pablo VI, "nada es perdido con la paz. Todo puede serlo con la guerra"
Con palabras de sus antecesores, Francisco y Pablo VI, el Papa León XIV, al final de la audiencia de los miércoles, ha lanzado un grito de ¡basta ya! contra las guerras y los "gritos" que desde ellas (Ucrania, Irán, Israel y Gaza) se elevan. Por eso, Prevost advierte de que "no debemos acostumbrarnos a la guerra" y, por el contrario, " debemos rechazar como una tentación el encanto de las armas poderosas y sofisticadas".
Más aún, dada la utilización de armas científicas de todo tipo, "la atrocidad de la guerra amenaza con conducir a una barbarie".
Texto papal
El corazón de la Iglesia está desgarrado por los gritos que se elevan desde los lugares en guerra, en particular desde Ucrania, Irán, Israel y Gaza. No debemos acostumbrarnos a la guerra. Al contrario, debemos rechazar como una tentación el encanto de las armas poderosas y sofisticadas.
En realidad, ya que en la guerra actual se utiliza armas científicas de todo tipo, su atrocidad amenaza a conducir a los luchadores a una barbarie de gran profundidad superior a la de los tiempos pasados. Por tanto, en nombre de la dignidad humana y del derecho internacional, repito a los responsables lo que solía decir el Papa Francisco: La guerra es siempre una derrota. Y con Pío XII: Nada se pierde con la paz. Todo puede perderse con la guerra”.
