El hospital pediátrico ‘Bambino Gesù’ celebró sus 150 años con el Papa Francisco, al personal sanitario: "Admiro la pasión y el entusiasmo que ponen en su trabajo de cuidado e investigación"

(AICA).- El papa Francisco saludó este sábado, en el Aula Pablo VI del Vaticano a más de 6.000 personas, entre médicos, investigadores, voluntarios, empleados, pacientes y familiares vinculados al hospital pediátrico romano Bambino Gesù (Niño Jesús), con motivo de su 150 aniversario.

Rodeado de los pequeños pacientes que subieron al escenario durante la audiencia, el pontífice recordó que el nacimiento de este Instituto está relacionado con la intuición de una mujer, Arabella Salviati, que "vivió en el fructífero tiempo del catolicismo social" y es además el “regalo de una familia generosa que ha hecho un gesto de inmensa sensibilidad en favor de los niños de todo el mundo", dijo Francisco.

Esa semilla inicial luego se desarrolló más allá de los límites de Roma y hoy el Hospital Pediátrico Bambino Gesù, señaló el Papa, se convirtió "no solo en un patrimonio de la comunidad romana, sino de la comunidad italiana e internacional".

El Santo Padre recordó el mensaje elegido para el 150 aniversario "El futuro es una historia de niños". Y enfatizó que, estando con niños, uno aprende a asistir al futuro.

Pasaron 150 años desde la creación del Hospital Bambino Gesù, desde que nació se fue convirtiendo en una realidad "grandiosa y preciosa, a la vanguardia y aún proyectada hacia el futuro". Su verdadera identidad, explicó el Papa, es "la autoridad moral de los niños enfermos y sufrientes" de muchos países.

Agradezco al Hospital por su apertura al mundo, por haber decidido enfrentar este sufrimiento y estos niños de muchos países. Sé bien que esto requiere muchos recursos económicos y, por lo tanto, agradezco a aquellos que están generosamente contribuyendo con sus donaciones a la Fundación "Bambino Gesù".

Manos bendecidas

El papa Francisco, que bendijo las manos de médicos y enfermeras en el Salón Pablo VI, también recordó la historia de una madre venezolana, que pudo encontrar el "cuidado de Jesús" que su hijo Jerson necesitaba. Refiriéndose a lo que escribió esta madre, el pontífice recordó la gratitud de esta madre por las "manos bendecidas y maravillosas" que cuidaron a Jerson. Dirigiéndose a médicos, cirujanos y enfermeras, el Papa instó a usar "las manos como herramienta de cuidado".

“Sean siempre consciente de esta bendición de Dios en sus manos. Tu habilidad para sanar es un regalo para ti y para las personas que se te han confiado. Y al mismo tiempo, queridos médicos y enfermeras, no pierdan su crecimiento profesional y su celo para preservar la tipicidad de esta institución. Necesitamos el compromiso de todos porque el Hospital Pediátrico "Bambino Gesù" continúa mostrando la predilección especial de la Santa Sede por los niños, con su propio estilo de cuidado amoroso de los pequeños pacientes, ofreciendo un testimonio concreto del Evangelio, en plena armonía. con lo que enseña la Iglesia”.

No hay cura sin investigación

El Papa luego enfatizó que "no hay cura sin investigación". Y "no hay futuro en medicina sin investigación". Desde este punto de vista, observó el Santo Padre, el "Bambino Gesù" está "proyectado por algún tiempo en el futuro, con resultados importantes en el campo del diagnóstico de enfermedades raras y el tratamiento de enfermedades complejas, con el desarrollo de terapias de precisión".

“Admiro la pasión y el entusiasmo que ponen en su trabajo de cuidado e investigación, y deseo que nunca pierdan la capacidad de ver la cara de sufrimiento de un niño, incluso detrás de una simple muestra para analizar y escuchen siempre el clamor de los padres dentro de sus laboratorios. El misterio del sufrimiento de los niños no deje de hablar a sus conciencias y motivar su compromiso humano y profesional”.

Francisco agradeció "el buen desempeño del hospital y su constante crecimiento, a pesar de las muchas dificultades". Es apropiado, agregó, que "en los próximos años podamos continuar ofreciendo a cada paciente la mejor atención y que nadie sea rechazado".

Finalmente, el Papa expresó su gratitud a la gran familia del Hospital Pediátrico Bambino Gesù, instando a "avanzar, fieles al Evangelio y obedientes a la autoridad moral de los niños que sufren".

"Les agradezco -concluyó- especialmente porque ayudan a los pequeños enfermos a sentir la tierna y tranquilizadora presencia de Jesús junto a ellos. Y no olvidemos sus palabras: todo lo que le hiciste a uno de estos pequeños, lo hiciste por Mí".

Durante la audiencia general, los pequeños pacientes del Hospital Bambino Gesù le dieron al Papa tres regalos. La primera es una estola sacerdotal decorada con dibujos infantiles inspirados en la historia bíblica de la Creación. El segundo es el cómic "Un hospital para el Papa Francisco" que narra la historia del "Complexe Pédiatrique di Bangui", en la República Centroafricana. El tercero es el libro de fotos "Vidas que ayudan a la vida", un viaje a través de la historia del Hospital entre el pasado y el presente.

150 años al servicio de los niños

El Hospital Pediátrico Bambino Gesù es el primer hospital pediátrico italiano. Nació en 1869 gracias a la familia Salviati que, en 1924, lo donó al papa Pío XI. Desde ese momento, todos los Papas que lo siguieron han promovido sus actividades para proteger la salud de los niños y para todos ellos, el Niño Jesús se ha convertido en "el Hospital del Papa". El hospital ha continuado su crecimiento progresivo hasta llegar a 607 camas hoy y un nivel de excelencia en la calidad y complejidad de la atención para lo cual se identifica como un punto de referencia internacional para la salud de niños y jóvenes. En este video, realizado por el Hospital Bambino Gesù, recordamos los números relacionados con esta preciosa actividad diaria al servicio de los pacientes y sus familias.