León XIV: "Que el trabajo sea una comunidad humana, no un lugar de muerte"
Audiencias
El Papa insta a los representantes de la Orden de Asesores Laborales de Italia a cuidar especialmente de "la protección de la dignidad humana, la mediación y la promoción de la seguridad"
(Vatican News).- “Los insto a mantener siempre la mirada bien abierta sobre las personas que tienen delante, especialmente sobre aquellas que atraviesan dificultades y tienen menos capacidad para expresar sus necesidades y defender sus intereses. Este es un gran acto de justicia y caridad”, con estas palabras el papa León XIV alentó a los representantes de la Orden de Asesores Laborales de Italia, a quienes recibió en audiencia la mañana de este jueves, 18 de diciembre, en la Sala Clementina del Vaticano.
Tres aspectos importantes
En sus saludos con ocasión del sexagésimo aniversario de creación del Colegio de Asesores Laborales, el Santo Padre les recordó que, tienen un compromiso valioso y responsable, que exige competencia y sentido de la justicia. De ahí, que les propuso reflexionar sobre tres aspectos importantes de su profesión.
“Quisiera destacar tres aspectos que considero especialmente importantes: la protección de la dignidad humana, la mediación y la promoción de la seguridad”.
La protección de la dignidad humana
Y para hablar del primer aspecto, el Pontífice retomó una expresión de su predecesor, el papa Francisco, y que es afirmada constantemente por la Doctrina Social de la Iglesia que dice: «Trabajando nos hacemos más personas, nuestra humanidad florece, los jóvenes se hacen adultos» (Exhortación Apostólica Dilexi te, 115).
“Estas palabras nos recuerdan que en el centro de cualquier dinámica laboral no deben situarse ni en el capital, ni en las fuerzas del mercado, ni en el lucro, sino en la persona, la familia y su bienestar, a los que todo lo demás está subordinado”.
Crear comunidades humanas y fraternas
En este sentido, el Papa dirigió su pensamiento a la necesidad de atender las necesidades de las familias jóvenes y de los padres con hijos pequeños, así como en la importancia de ayudar a quienes, mientras trabajan, deben cuidar a familiares ancianos y enfermos.
“Estas son necesidades que ninguna sociedad verdaderamente civil puede permitirse olvidar o descuidar, y ustedes tienen una forma de apoyar a quienes tienen dificultades para atenderlas. Hoy, en un contexto en el que la tecnología y la inteligencia artificial gestionan e influyen cada vez más en nuestras actividades, es urgente garantizar que las empresas se caractericen ante todo como comunidades humanas y fraternas”.
La mediación
Al referirse al segundo aspecto, la mediación, el papa León destacó la función que sitúa a los Asesores Laborales como vínculo entre la dirección y los empleados, facilitando relaciones esenciales tanto para el buen funcionamiento de las empresas como para el bienestar de los trabajadores. Asimismo, el Papa indicó que, ellos gestionan aspectos legales y administrativos cruciales para la vida de los trabajadores y de sus familias, pero advirtió de dos tentaciones que pueden surgir.
“En esta función, pueden surgir dos tentaciones: por un lado, la burocratización excesiva de las relaciones; por otro, la distancia y el desapego de la realidad. Ambas son perjudiciales, ya que, a la larga, hacen inhabitable el entorno empresarial, impidiéndole ser, conforme a su verdadera vocación, una sinergia de solidaridad”.
Este es un gran acto de justicia y caridad
De ahí la invitación del Santo Padre a no vivir su profesión oprimidos por el empleador, como si todo lo demás fuera menos importante. Y les propone lo que escribe San Juan, en su Primera Carta: «Si alguno posee bienes de este mundo y ve a su hermano en necesidad, pero le cierra su corazón, ¿cómo puede morar en él el amor de Dios?» (1 Jn 3,17).
“A la luz de estas palabras, al mediar entre los interlocutores sociales, les insto a mantener siempre la mirada bien abierta sobre las personas que tienen delante, especialmente sobre aquellas que atraviesan dificultades y tienen menos capacidad para expresar sus necesidades y defender sus intereses. Este es un gran acto de justicia y caridad”.
La promoción de la seguridad
Finalmente, el Pontífice se centró en el tercer aspecto, la promoción de la seguridad. Por eso les recordó que, “la formación y la educación continua de los trabajadores” son importantes para la “prevención de accidentes”. Asimismo, el Papa indicó que hoy en día todavía “se producen demasiados accidentes y muertes accidentales en el lugar de trabajo”. Lo que deberían ser espacios de vida, a menudo se convierten en lugares de muerte y desolación.
“Por eso, quiero recordarles que la seguridad en el trabajo es como el aire que respiramos: solo nos damos cuenta de su importancia cuando trágicamente falta, ¡y siempre es demasiado tarde!. Más vale prevenir que curar, y este es el objetivo de sus valiosas contribuciones educativas”.
Antes de impartirles su bendición el Papa León XIV les recordó que tienen “una importante tarea” y los animó a cumplirla con pasión y dedicación, sabiendo que muchos hermanos y hermanas cuentan con su contribución para realizar su trabajo en paz.
“Los encomiendo a la intercesión de la Santísima Virgen María y de San José, Patrón de los Trabajadores, a la vez que les imparto de corazón mi Bendición Apostólica a ustedes y a sus familias. Les deseo a todos una Santa Navidad”.
