¡Feliz martes! Empezamos el mes de noviembre y lo vamos a celebrar con una estupenda música especial para el día de hoy: la solemnidad de todos los santos. Para días tan señalados siempre encontramos algo interesante: es el caso de hoy.

De ella se encarga hoy Alexander Agricola (1445/6-1506), compositor neerlandés nacido en Gante y fallecido en Valladolid. En una escrito se alude a él como siendo belga, que murió en 1506 mientras viajaba por España por estar al servicio de Felipe el Hermoso. Un registro de pago de 1500 lo identifica con Alexander Ackerman. Fue hijo ilegítimo de Lijsbette Naps, también conocida como Quansuijs, una mujer de negocios establecida en Gante. Su padre era Heinric Ackerman, procurador de un hombre rico de esa ciudad. Es posible que nuestro maestro fuese cantor en la iglesia parroquial de San Nicolás de Gante a la que la propia Lijsbette hizo una generosa donación. Se sospecha que era un gran virtuoso de los instrumentos de cuerda (en un epitafio se alude a él como clarus vocum manuumque).

Disfrutemos de su motete Gaudeamus omnes in Domino, para dos voces; fue publicado en 1502. Es un ejemplo de música muy curioso porque casi nos retrotrae a épocas aún más antiguas, en las que la polifonía nacía a partir de un canto llano y una voz de discanto. Sin embargo, se diferencia de maestros más antiguos (como Ockeghem o Dufay) en que la voz superior es muchísimo más florida y tiene una gran elaboración. Una belleza.

La interpretación es del Unicorn Ensemble.