Bendigamos a Dios

benedicamus-domino-scheidt

¡Feliz miércoles! Bendecir a Dios es también reconocer que es santo, el santo entre los santos, que es nuestro padre. En realidad, la obra de hoy tiene palabras tomadas del final de la misa, momento en el que se bendice a Dios antes de ir a nuestras tareas.

samuel-scheidt

La música de hoy es de Samuel Scheidt (1587-1654), compositor alemán nacido en Halle. El año que nació Scheidt lo hicieron también otros dos maestros alemanes pioneros cuyos nombres empiezan por «Sch»: Schein y Schütz. Los tres se hicieron amigos y se embarcaron en la tarea de concebir un lenguaje musical alemán más global, aunando elementos tanto de sur como del norte. En sus obras, principalmente en las religiosas, vemos que se apega de forma especial al coral luterano, que presenta en multitud de variaciones para diversas combinaciones de voces e instrumentos. La música de Scheidt está influida por la de Sweelinck (con quien estudió en Ámsterdam), pero también constituye una voz independiente, sobre todo cuando se aplica al contrapunto. Su Tablatur-Buch, composición de 1650, contiene unos cien acompañamientos para canciones sacras y salmos que se usan principalmente para la liturgia luterana, a la vez que sirve de acompañamiento a la congregación que canta.

Disfrutaremos de su Benedicamus Domino á 6, SWWV 158, que es una composición para órgano. Pertenece a una colección suya titulada Tabulatura Nova, que fue publicada en Hamburgo en 1624. Es una pieza que ha dado ciertos quebraderos de cabeza a los estudiosos de la obra de Scheidt, puesto que la publicación original contiene notas para ser cantadas, pero no sabemos si ese canto debería ser alternado con esta composición para órgano. En cualquier caso, el maestro nos ofrece una composición imponente en la que, de ser interpretada en el órgano, el pedal incluso tendría que ejecutar dos voces. Una maravilla.

La partitura de la composición puede descargarse aquí.

La interpretación es de Kristian Olesen al órgano.

Volver arriba